Pamplona, la ciudad de los Sanfermines, que fue fundada por el general romano Pompeyo en el año 75 antes de nuestra Era, sobre un asentamiento vascón, logró un cierto entendimiento entre romanos y vascones a lo largo de su historia común. Entre los siglos IV y IX permanece en manos visigodas primero, y musulmanas después, hasta que en el siglo X los clanes consiguen la autonomía necesaria para dar a luz el Reino de Pamplona.
Así, plural, la ciudad de Pamplona sorprende por sus calles plenas de color y vida. Crisol de modernidad e historia, el viajero pasea entre edificios actuales y grandes avenidas que dan paso a callejuelas estrechas e iglesias y murallas medievales. Quizá por esto Hemingway quedó fascinado por esta ciudad en la que pasó grandes períodos de su vida, y que marcó profundamente su carrera y su obra al alimentar su amor por los toros y la Fiesta Nacional.
Y, cuando llega San Fermín, mezcla de fiestas cristiana y pagana, la ciudad se transforma y aparece en rojo y blanco, exultante y esperanzada, anhelando el chupinazo. Sus moradores, famosos por la nobleza y robustez de su carácter, abandonan por unos días sus rutinas diarias para dar paso al pamplonica que llevan dentro.
Qué visitar
Catedral gótica de Santa María: Fue reconstruida en los siglos XIV y XV sobre los restos de una anterior catedral románica cuyos vestigios mejor conservados se guardan en el Museo de Navarra. Ubicada en la Plaza de la Catedral, presenta una fachada neoclásica y en su interior atesora un bello claustro gótico francés, el sepulcro de alabastro de Carlos III El Noble y su esposa Doña Leonor del siglo XV, y la famosa campana María.
Cámara de Comptos Reales: En la Calle Ansoleaga, de estilo gótico civil de los siglos XII-XIV, se encuentra este edificio que fue sede del antiguo Tribunal de Cuentas.
Casa Consistorial: En la Plaza del Ayuntamiento, su fachada mezcla los estilos del barroco tardío y el principio del neoclasicismo.
Ciudadela: Fortaleza de los siglos XVI y XVII, emplazada en la Avenida del Ejército, que se utiliza hoy en día para actos culturales.
Palacio del Virrey o de Capitanía: En la Calle Dos de Mayo, es el más antiguo de los palacios de Pamplona, fechado en el siglo XII, y fue la residencia de los reyes de Navarra.
Monumento a los Fueros: Se encuentra situado en el Paseo de Sarasate. Fue erigido a principios del siglo XX a petición popular.
Iglesias: Iglesia de las Agustinas Recoletas, Iglesia de San Lorenzo, Iglesia de San Nicolás, Iglesia de San Saturnino-San Cernín, Iglesia de Santo Domingo.
Museos: Museo Catedralicio Diocesano, Museo de Navarra, Museo de Pablo Sarasate, Museo de Etnográfico, Museo de Jorge Oteiza.
Alrededores, rutas y espacios naturales
Ruta del Camino de Santiago: El Camino de Santiago está compuesto, en Navarra, por dos tramos. El primero comienza en Orreaga-Roncesvalles, enclave situado en el extremo occidental de la cordillera pirenaica, y atraviesa los Pirineos por el puerto de Ibañeta para desembocar en Puente la Reina, punto de unión de ambos ramales. El segundo comienza en Yesa, municipio perteneciente a la merindad de Sangüesa que está situado a los pies de la Sierra de Leyre, y termina en Viana, próspera ciudad ubicada en la zona fronteriza con La Rioja.
Ruta del Valle del Roncal: El itinerario, que recorre uno de los más hermosos valles navarros, parte de la ciudad de Sangüesa y transita los más atractivos pueblos pirenaicos como Liédena, Yesa, Escó, Sigües, Burgui, Isaba y Ustárroz.
Valle del Roncal Artajona Selva de Irati
Ruta de las Fortalezas de Navarra: En la zona media de Navarra, desde Olite hasta Pitillas, pasando por las localidades de Tafalla, Artajona, Unzué, San Martín de Unx, y Ujué se conservan esplendorosas murallas y fortalezas, restos medievales de inmenso valor histórico-artístico.
Selva de Irati: Un tupido bosque formado por abetos, encinas, robles y, fundamentalmente hayas cubre la cuenca alta del río Iratí.
Foz de Arbayún: El río Salazar ha tallado un impresionante cañón de gran riqueza biológica en las derivaciones de la Sierra de Leyre, declarada Reserva Natural.
Gastronomía
Los navarros destacan por su buen comer y mejor beber. Famoso es su pacharán, un licor elaborado a base de la maceración en anís de endrinas. También el moscatel de Navarra es conocido más allá de sus fronteras. En la repostería son notorias las pastas de Layana, las tortas de Chanchigorri, las mantecadas de Salinas y las Delicias de Navarra (bombones rellenos de frutas).
Las verduras son parte importante de la gastronomía Navarra, sobresaliendo platos como la menestra de verduras, el pisto, la piperrada, el gazpacho navarro o la ardanzopa. Las alubias rojas y las pochas despuntan entre las legumbres. Las setas y los hongos se utilizan como acompañamiento de muchos guisos. Y, por último, no menos importante, sus chuletones de buey y de ternera, el toro estofado en sanfermines, la matanza del cerdo, la caza, el cordero al chilindrón, los menudicos, el gorrín asado o el zikiro jate descollan entre sus carnes.
Fiestas
San Fermín (del 6 al 14 de julio): El chupinazo, que estalla a las 12 del mediodía del 6 de julio, marca el comienzo de las fiestas que se prolongarán a lo largo de una semana.
Olentzero (24 de diciembre): El Olentzero, personaje que encarna al carbonero, baja de la montaña para festejar la navidad. En la actualidad está adquiriendo relevancia frente a Papá Noel y los regalos se hacen en su nombre.
Datos prácticos
Pamplona es la capital de la provincia de Navarra. Se encuentra en la depresión prepirenaica central y está bien comunicada con las capitales vecinas y con Francia. Es una ciudad relativamente pequeña, que se puede visitar a pie, y que además tiene una buena red de transporte público.