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Sierra de Gredos, senderismo y rutas a caballo

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Dejarse llevar por los atractivos naturales de la Sierra de Gredos, descubrir y disfrutar de su belleza, supone adentrarse como en una fortaleza invencible que se esconde de las miradas de aquellos curiosos sin el debido entusiasmo para adentrarse en su interior. Un espacio íntimo que protegen sus cumbres a modo de torres del homenaje y almenas, en cuyo interior la vista se recrea con sus patios, fuentes, jardines y estanques. Gredos es el imponente roquedo que se divisa desde las, entonces, dos castillas, desde el curso del Tajo y desde las monumentales plazas de Ávila y Salamanca.

La Sierra de Gredos se denomina al gran bloque del Sistema Central que se extiende entre Guadarrama y la Sierra de Gata, desde San Martín de Valdeiglesias hasta las depresiones de la comarca de Béjar. Se despliega a lo largo de más de cien kilómetros de longitud y presenta un accidentado relieve producto de la acción glaciar sobre su manto granítico. Entre sus estribaciones abundan los riscos, gargantas, barrancos, cuchillares, paredones, lagunas y morrenas. La máxima altura del conjunto es el Pico Almanzor, de 2592 metros, el punto más elevado del Sistema Central. Uno de los lugares más renombrados de estos parajes es la Laguna y el Circo, al pie de las más altas cumbres de la Sierra de Gredos y objeto de nuestra excursión.

Sierra de Gredos (Ävila)
Sierra de Gredos (Ävila)

La sierra cobija infinidad de especies tanto animales como vegetales y la orientación de las laderas y los pronunciados desniveles favorecen la existencia de una gran diversidad botánica. La fauna, con más de doscientas especies de vertebrados controladas, tienen en el la conocida cabra montés de Gredos su mejor representante. Se trata del mamífero más significativo y auténtico. Con él también conviven la nutria, el buitre leonado y el águila real, entre otras.

Adentrase en las estribaciones, llegar al corazón de Gredos, traspasar ese murallón no es tarea fácil. Por suerte, aún no se han instalado teleféricos que alteren su grandiosidad. Hasta ahora, solo algunos desafortunados proyectos han invadido su hosca, agreste e imponente soledad, plantando balizas, señalizando los caminos, haciendo más transitables sus caminos, cambiando la ubicación de sus fuentes, construyendo extraños edificios para canalizar sus manantiales. En definitiva, poniendo puentes que facilitan su degradación.

No en vano, este enclave, se ha convertido en foco turístico para los amantes de la naturaleza, tanto por el patrimonio geológico y biológico de la zona, como por las diferentes actividades lúdicas y deportivas que se pueden desarrollar en la comarca.

Senderismo. De la Plataforma de Gredos al Mirador de Peña el Rayo

Adentrarse en el macizo de Gredos no es una actividad reservada para expertos montañeros. Por estas montañas se han trazado infinidad de caminos, muchos de ellos accesibles a cualquier persona que, sin grandes facultades físicas, sienta la mínima atracción por los legados de la naturaleza en general y, más concretamente, por descubrir estas grandiosas obras naturales de las que aún podemos disfrutar en la Península Ibérica.

Nuestra marcha nos conducirá por montañas, neveros, pedreras que nos permitirán disfrutar de una de las satisfacciones más hermosas que podamos imaginar: la contemplación del majestuoso Circo de Gredos y sus cumbres, rozando los tres mil metros de altitud como El Almanzor o La Galana. No obstante debemos ser cautelosos en nuestra travesía. Los cambios climáticos y la adversidad meteorológica de estos parajes son siempre impredecibles. Igualmente es importante conocer nuestra capacidad física y nuestros conocimientos previos de otras rutas realizadas en entornos parecidos.

Cualquier itinerario propuesto en un espacio como la Sierra de Gredos requiere un mínimo de práctica en otras rutas de montaña de menor dificultad.

El itinerario propuesto es una de las mejores opciones para quienes deseen admirar la grandiosidad del circo sin necesidad de llegar hasta la denominada Laguna Grande. Una excursión entretenida, apta también para niños de cierta edad y que se entusiasmen con los paisajes de montaña, ya que la marcha tiene tramos de cierta pendiente y es necesario prever más de cuatro horas de marcha, en las que se incluyen las obligadas paradas para la contemplación, la foto y el avituallamiento.

Desde la conocida Plataforma de Gredos, tomamos el camino empedrado que comienza con una pendiente ascendente detrás del kiosco. Este es conocido como la Trocha Real, construida a principios de siglo cuando el rey Alfonso XIII venía a cazar a estas montañas.

El camino continúa siempre en ascenso, con algunos zig-zag sin hasta que se suaviza la pendiente. En invierno este tramo puede resultar algo delicado por las posibles placas de hielo que encontremos. Unos doscientos metros, antes de alcanzar el característico pluviómetro, continúa a la derecha el camino empedrado y balizado. En este punto un cartel indica hacia la Laguna Grande. Unos metros de pendiente acusada nos sitúan en el Prado Pozas, ahora perfectamente señalizados con guías que nos marcan el camino. Cruzando el prado podemos observar a nuestra derecha las ruinas del antiguo refugio del Club Alpino Español y a su lado el refugio de Reguero Llano donde, si lo deseamos, hacer una parada y descansar, aunque para acercarnos debemos desviarnos unos metros de nuestro sendero.

Al frente vemos como se levantan los cortados que forman las Paredes Negras, hacia donde nos conduce el camino. En la vaguada, cruzamos un puente de hormigón, por otra parte muy poco afortunado, por el que cruzamos las el río Pozas. A partir de aquí, se inicia una fuerte subida por una senda muy marcada que nos lleva hasta la fuente de Los Cavadores, construcción también muy inoportuna. Los modernos proyectos de recuperación de los espacios naturales optaron por cambiar la ubicación de la fuente, antes manantial, levantando una construcción en piedra que en nada es apreciada por los verdaderos amantes de la naturaleza. Otrora la fuente de Los Cavadores era utilizada por nuestros antepasados que explotaban unas cercanas minas de galena en estas laderas.

La senda continúa también en ascenso hasta la cuerda del Cuento, a 2170 metros, entrada a Los Barrerones, a nuestra derecha. En este punto, dependiendo de nuestra fortaleza, llevaremos aproximadamente una hora y media de marcha, sin descansos, siendo un lugar apropiado para efectuar una parada y admirar el paisaje. Tras continuar la marcha comenzamos a descender por el antiguo camino de la Trocha Real, vía que desde Candelada ascendía hasta la Hoya de las Cinco Lagunas.

Descendiendo un poco más, encontramos a la derecha un espléndido mirador en la “Peña del Rayo”, donde podemos tener toda la visión del fascinante Circo de Gredos, protegido por las más altas cumbres del Sistema Central. Nos encontramos a 2032 metros de altitud. Y a nuestro frente, encima del refugio que divisaremos al otro lado de la Laguna, se encuentra nuestra fortaleza, “El Almanzor” con sus 2.592 metros, seguido del Ameal de Pablo. Al lado “La Galana”, que dista sólo 24 metros de altura con el Almanzor, hecho por el cual (contemplando los dos en la lejanía) da la impresión de que fuera más elevada que el famoso pico y por último Cabeza Nevada.

Todo montañero – andarín toma buena cuenta del tiempo de regreso, nada peor que se nos precipite la noche. Hasta el Mirador de Peña el Rayo habremos invertido más de dos horas,  y cuanto menos debemos contar con algo más de una hora de vuelta. Reandar el camino en busca de la Plataforma y el merecido refrigerio, con lo que daremos por concluida nuestra excursión.

Gredos a caballo

De la localidad abulense de Hoyos del Espino, considerada por algunos autores como la antesala de la Sierra de Gredos, parten un sinfín de senderos y rutas naturales que recorrer y descubrir, bien haciendo senderismo, a caballo o en bicicleta. “A caballo”, de entre estas opciones, es la que invita a los amantes del turismo rural y la naturaleza la empresa Gredos a Caballo, pioneros en España del turismo ecuestre.

Difícilmente se puede encontrar dentro de nuestra geografía un entorno más apropiado para disfrutar del placer de montar a caballo. Aunque no se puede afirmar que Hoyos del Espino haya sabido conservar el sabor y calor típicamente rural de otros pueblos, bien es cierto que se encuentra en un enclave natural incomparable. Rodeado de los bellos parajes que se suceden en el Parque Nacional de la Sierra de Gredos, entre frondosos bosques de pinos refrescados por el río Tormes. No obstante, existen algunas iniciativas, como alojamientos de turismo rural y actividades que hacen de esta zona un lugar privilegiado, muy agradable por su hospitalidad y donde poder disfrutar de la magia del contacto con la naturaleza en estado puro.

Gredos a Caballo (En Hoyos del Espino) Ofrecemos una gran variedad de recorridos con un esmerado itinerario que prevé los paisajes más hermosos y aislados del ruido, así como los mejores lugares para descansar o disfrutar de la gastronomía local. A lo largo de estos años, nuestros clientes han podido disfrutar de vacaciones montando a caballo y recorriendo los caminos, cañadas, rutas de trashumancia en perfecto equilibrio con la naturaleza. Al paisaje, la gastronomía y los guías expertos, hay que añadir la tranquilidad de llevar los mejores y más resistentes caballos hispano árabes cruzados con caballos autóctonos, cuya nobleza, resistencia y manejabilidad los hacen idóneos para disfrutar del paisaje, de agradables galopadas. Tel.: (+34) 920 34 90 85 – 615 94 60 26

Mapa de la Sierra de Gredos

Datos prácticos

Como llegar a la Plataforma de Gredos. Desde Ávila por la N-110  en dirección a Plasencia y Cáceres. Dejamos esta carretera para tomar la N-502 en dirección a Mombeltran y Arenas de San Pedro. Tras pasar Solosancho y el Puerto de Menga. A la altura de la conocida como Venta Rasquilla, un desvió a la derecha indica hacia el Parador de Turismo de Navarredonda. Después de atravesar la localidad de Navarredonda y Barajas, a pocos kilómetros un desvío a nuestra izquierda conduce a la Plataforma. En el mismo punto en el que se encuentra un singular monumento a la cabra montés.

Desde Salamanca o Extremadura. Llegar hasta Plasencia por la N-630. Desde Plasencia en dirección a Ávila por la N-110 hasta la localidad del Barco de Ávila de donde parte la C-500, Atravesando Navalperal, Navacepeda y Hoyos.

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