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Una aventura por las Islas Griegas

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Grecia tiene alrededor de unas seis mil islas. De ellas, algo más de un centenar están habitadas de forma permanente. ¿Te animas a perderte entre algunas de ellas?

Visitar las famosas Islas Griegas es uno de los sueños que comparten miles de personas a lo largo y ancho del globo. Para hacerlo, muchas optan por realizar un crucero por Grecia, que incluye algunas de las islas más destacadas del país europeo.

Con algunos de los paisajes más espectaculares del mundo, Grecia tiene la fortuna de ser además uno de los países con mayor historia y, en consecuencia, cuenta con reliquias únicas que convierten este destino en uno de los favoritos para los amantes de la historia y el arte.

Las islas más famosas de Grecia

Si estás pensando en realizar un crucero por Grecia para visitar sus islas, pero también te encantaría pasar un día en su capital, no te preocupes. Por lo general, cualquier viaje en barco como, por ejemplo, los de Costa Cruceros, incluyen una parada en Atenas. La ciudad, aunque exquisita y llena de vida, poco tiene que envidiar a los rincones que enumeramos a continuación.

Santorini. Parada obligatoria en cualquier crucero o viaje a las islas de Grecia. Sus casas blancas la convierten en una de las zonas más bonitas para los amantes de la fotografía. Aparte de su belleza, Santorini cuenta con un recorrido lleno de encanto entre Fira y Oia que te recomendamos recorrer. Y si te gustan los volcanes, aprovecha para acercarte al volcán de Nea Kameni y date un chapuzón en las aguas termales que hay a su alrededor.

Mykonos. Lo bueno de las islas es que son pequeñas y, por tanto, se puede disfrutar de ellas por completo en poco tiempo. En esta, lo ideal es perderse por Chora, su capital, y tapear en algunas de las terrazas que hay frente a la playa. Tras coger fuerzas, ¿por qué no acercarse a Panagia Paraportiani, la iglesia más fotografiada de la isla? A esto no te olvides de sumarle un paseo por la conocida como «pequeña Venecia», con casitas del siglo XVIII de colores y encaladas.

Creta. ¿Quién no ha oído hablar de esta isla? Es la más grande de Grecia y aúna todo lo que nos puede atraer de una isla: playas paradisíacas, restos arqueológicos, pueblos pesqueros y puestas de sol. Todo ello junto a una gastronomía que enamora a cualquiera. Si nos preguntas por una playa concreta: la de Balos.

Milos. No tan conocida como las anteriores, esta pequeña isla del mar Egeo pertenece al archipiélago de las Cycladas y cuenta con, nada más y nada menos, que 70 playas…¡te retamos a visitarlas todas! También con las típicas casitas blancas, destaca el pueblo de Plaka, con una iglesia impresionante y unas vistas increíbles desde su castillo.

Qué comer en Grecia

Puede que no aparezca en la RAE, pero veranear es sinónimo de playa, sol y mucha gastronomía. Como comprenderás, en Grecia esto no iba a ser diferente. Y es que nadie perdona una cervecita fresca en una terraza frente al mar y con el bañador aún mojado del chapuzón en una de las calas más bonitas de alguna de sus islas.

Pero, ¿y si a esto le sumamos unas raciones o algunos platos típicos griegos que no probarás en ningún otro sitio? Entonces sigue leyendo.

Mousakás. Este plato, en apariencia similar a una lasagna, es uno de los más famosos en Grecia. Elaborado a base de capas de berenjena, carne picada, patatas y bechamel, se cocina en el horno y el resultado es espectacular.

Tzatziki. Su nombre es complejo, aunque su preparación no tanto. Y es que se trata de una salsa que acompaña a muchos de los platos en el país y se hace a base de yogur griego, pepino y ajo.

Tiropita. ¿Amante de las empanadas? No dejes de probar este manjar tan básico, con queso feta y filo, una masa de hojaldre muy finita.

Yemistá. Tomates y pimientos asados que se rellenan, por lo general, de arroz y carne picada. A veces, para su creación, también se usa calabacín.

Baklava. Si eres un loco de los postres, es muy probable que hayas oído alguna vez hablar de este postre. Se trata de un pastel que lleva pasta de pistachos o nueces trituradas en una masa filo y bañado en almíbar o jarabe de miel. ¡Una bomba!

Loukoumades. Popular también en Turquía y en el Medio Oriente, son unas bolitas de pan frito recubierto en almíbar o miel y con un toque de canela.

¿Y si prefiero visitar unas islas más cercanas?

Estamos más que convencidos de que no dudarás ni por un momento en visitar las Islas Griegas. Sin embargo, somos conscientes de que, si nunca has realizado un crucero y quieres saber si eres de los que se marean, pruebes primero con un viaje en barco algo más corto y cercano a la Península. Por este motivo, los cruceros por Canarias son otra de las opciones más elegidas entre los que deciden disfrutar de una escapada con Costa Cruceros.

Su recorrido, por lo general, va más allá de las columnas de Hércules, llegando a parajes como la isla portuguesa de Madeira o la República de Cabo Verde.

Las Azores. Formado por varias islas, este archipiélago es el lugar ideal para desconectar. En la famosa Boca do Inferno, un sendero en mitad de la naturaleza, encontrarás las mejores vistas de la zona. Y, si te acercas a la isla de San Miguel, alucinarás con las Portas da Cidade, unas puertas que antiguamente se usaban como entrada a la ciudad. Aunque, si tenemos que recomendarte un punto concreto, nos decantamos por Terceira. Allí puedes perderte por la Serra de Santa Bárbara o descubrir la gastronomía de Angra do Heroísmo.

Madeira. Este tándem de selva e historia es ideal para los amantes del senderismo. Colonizada a principios del siglo XV, destaca sobre todo su red de caminos, que recorre la isla de norte a sur. Además, te recomendamos pasar un día por Funchal, su capital, y probar la famosa queijada, un postre típico hecho a base de requesón, huevos y azúcar.

Cabo Verde. No tan conocido como los anteriores, este país africano está formado por las islas de Sal y Boa Vista. De la primera, destacan las playas de Santa María, de aguas turquesas, y la posibilidad de poder realizar alguna actividad acuática, como buceo. En Sal Rei, en cambio, la mejor opción, más allá de sus playas, es perderse por el pueblo costero o hacer alguna excursión en quad.

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