El campo óptico ha sido uno de los que mayor crecimiento ha experimentado durante los últimos años a raíz del desarrollo tecnológico. De manera progresiva, cada vez han sido más los fabricantes que han incorporado nuevas fórmulas que permiten a los usuarios disfrutar de experiencias únicas que antaño hubieran sido imposibles de alcanzar: desde la observación de aves hasta la caza, pasando por la astronomía o las observaciones nocturnas.
Múltiples escenarios obligan a que escoger los mejores prismáticos sea clave para poder disfrutar de una experiencia inolvidable. Sin embargo, y dada la creciente oferta que existe en la actualidad, no siempre es sencillo escoger la mejor opción de acuerdo al campo en el que estemos interesados. Existen múltiples elementos que tienen un impacto directo en nuestro día a día en la interacción con este tipo de objetos. En este artículo analizamos algunos de los aspectos que cualquier amante de las experiencias visuales tiene que tener en cuenta para poder escoger el mejor prismático de acuerdo a sus necesidades.
La apertura y la potencia del prismático, clave en su rendimiento
Dos de los aspectos que tienen un mayor peso en el resultado final de los prismáticos por los que nos decantemos hace referencia a la capacidad y la potencia de cada prismático. El término de potencia hace referencia a la capacidad que tiene el prismático en cuestión para poder aumentar el tamaño real del objeto en el que estemos interesados. Una capacidad de 10 x 50 quiere decir que podremos utilizar los prismáticos para poder aumentar hasta en 50 veces el objetivo en cuestión.
De este modo, los amantes de la naturaleza o de los animales rapaces podrán disfrutar de una experiencia única. Vislumbrando cualquier elemento en el que fijen su atención desde la distancia adecuada sin apenas perder resolución. Siendo un valor a tener en cuenta dependiendo del tipo de uso que vayamos a realizar del prismático en cuestión.
La apertura de la lente se define a partir de su capacidad para captar la luz que tiene el modelo en específico.
La importancia del aumento
Cuanto mayor sea el aumento, podremos disfrutar del paisaje o del objeto de una forma mucho más próxima. Sin embargo, es importante conocer que no siempre es la mejor opción apostar por los aumentos más altos, puesto que la calidad de la imagen puede verse comprometida. El resultado es que no estaremos disfrutando de la belleza paisajística como se merece.
En términos generales, los usuarios de los prismáticos son perfiles que tienen una cierta inclinación hacia recorrer determinadas experiencias que únicamente a través de una buena resolución se pueden resolver al máximo.
Debemos conocer cuál es el uso que vamos a ejecutar del prismático para escoger el aumento adecuado. Cuanto mayor sea la distancia, además, mayor posibilidad de experimentar determinadas vibraciones que hagan necesario el uso de un trípode que permita generar la estabilidad necesaria.
Prismáticos resistentes al agua para experiencias con riesgo
¿Eres un amante de los viajes y de la naturaleza que estás buscando capturar el momento perfecto sobre algún entorno en el que exista el riesgo de salpicaduras? Es habitual que cuando queremos observar el comportamiento de determinados animales tengamos que acercarnos a una zona en la que nuestra estabilidad puede quedar comprometida.
En el caso de que nuestros prismáticos no sean resistentes al agua, es posible que terminen rompiéndose. Para evitarlo, si tenemos claro que este tipo de amenazas van a ser un habitual en nuestro día a día utilizando este tipo de objetos, debemos apostar únicamente por aquellos que son resistentes al agua. También agradeceremos esta funcionalidad cuando tenemos que trabajar sobre entornos húmedos o en aquellas regiones geográficas en las que el pronóstico de lluvia sea mucho más habitual que en la mayoría de las zonas de España.
El tipo de prismático de acuerdo al uso a realizar
- En el caso de que queremos usar los prismáticos para llevar a cabo la observación de aves, lo más habitual es decantarse por prismáticos 8 x 42 o, en su defecto, alguna medida aproximada.
- Si, por el contrario, queremos utilizarlos para observar el ámbito astronómico, los prismáticos también pueden servir de ayuda. Si bien es cierto que los telescopios son una mejor opción, en el caso de querer sumar un extra de versatilidad, deberemos acudir a objetivos amplios y, sobre todo, largos. Por lo tanto, podemos comenzar en un prismático de 7 x 50 y terminar en uno de 20 x 80. De media, el 10 x 50 es el más versátil.
- Si estás buscando un tipo de prismático que pueda servirte de ayuda para una gran cantidad de actividades, entonces una medida de 10×42 puede ser mucho más efectiva. Optimizando su uso para una gran cantidad de escenarios.
Los prismáticos se han convertido en una herramienta imprescindible para el viajero más intrépido. Elementos como los mencionados en este artículo nos ayudarán a encontrar la mejor opción de acuerdo a las necesidades con las que contamos.