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Hotel Rural Salinas de Imón. Spa

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Hotel con spa en un edificio clásico en Guadalajara. El Hotel y Spa Salinas de Imón es un establecimiento con encanto ubicado en Imón, entre Sigüenza y Atienza. Este pequeño hotel de doce habitaciones se ubica en una casa señorial del siglo XVII, cuidadosamente restaurada.

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Hotel Rural y Spa Salinas de Imon

Calle Cervantes, 49. Salinas de Imon
19269 – Imon (Guadalajara)
Tel.: 949 39 73 11

Página web

 

Próximo a Madrid y Guadalajara, el Hotel y Spa Salinas de Imón conserva detalles clásicos, y una decoración con mobiliario exclusivo y obras de arte.

Hacia 1750 fue adquirido por Carlos III, quien lo convirtió en las oficinas y residencia del administrador de las Salinas de Imón. Durante la Guerra Civil fue requisado por los alemanes durante “la campaña de Guadalajara” y fue utilizado como cuartel. Funcionó como oficinas de las Salinas hasta mediados de los años 90, fecha en la que se remodeló en hotel por su anteriores propietarios, modernizándose actualmente con la exposición de obras gráficas de reconocidos artistas contemporáneos.El hotel forma parte de los Hoteles Históricos de Europa y de la Fundación de Casas Históricas y Singulares de España.

Por otra parte, Imón pone a su disposición una sala con capacidad para 18 personas dotada de todos los medios audiovisuales necesarios. Además, cerca del hotel podrá visitar las salinas de origen romano de la zona.

Rutas por los alrededores
Desde Salinas merece la pena la visita a la cercana localidad de Atienza. Esta villa medieval conserva la estructura urbanística y el sabor arquitectónico de los tiempos en que constituyó un estratégico lugar fronterizo entre las posesiones cristianas y musulmanas. Su casco histórico está declarado Bien de Interés Cultural.

Igualmente, se hace imprescindible la visita a Siguenza, situada al norte de la provincia de Guadalajara cuyo excelso patrimonio arquitectónico fue declarado Conjunto Histórico-Artístico en 1965. El castillo, la catedral y la plaza Mayor son los tres puntos de obligada visita de la ciudad, si bien las calles de Sigüenza están repletas de edificios civiles y religiosos de gran belleza.

Y, muy cerca de Sigüenza, para los amantes de los espacios naturales, las Hoces del río Dulce y los pueblos de Pelegrina y La Cabrera. Ambas localidades tienen el privilegio de contar con el espectacular paisaje que ofrecen las hoces del río Dulce. Su riqueza fue ensalzada por Félix Rodríguez de la Fuente, quien eligió estos pagos para grabar un buen número de sus películas. Hoy, un mirador, erigido por suscripción popular agradece en Pelegrina la labor de este amante de la naturaleza.

 

 

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