Este otoño e invierno acércate en tren a las capitales catalanas para escapar de la rutina y descubrir la variada cultura y gastronomía que nos aportan cada una de estas ciudades.
¿Qué te espera en ellas? Una catedral que observa desde las alturas, en Lleida. El patrimonio romano que nos conecta con una de las civilizaciones más importantes de la historia de la humanidad, en Tarragona. Y ya que estamos en la antigua Tarraco, no podemos irnos sin visitar Reus, donde el modernismo y el vermut nos recibirán con muchas ganas de ser disfrutados.
Sube un poco más al norte, para dejarte seducir por la dinámica Barcelona, aquella que más se adapte a ti. Despierta tus sentidos, en Girona. Y por último, abre tu mente en un mundo tan surrealista como el de Figueres.
Si quieres saber más, ¡súbete al tren y acompáñanos a recorrerlas! Y, por supuesto, sigue leyendo.
La Seu Vella al anochecer, Lleida 
Claustro de la Seu Vella, Lleida
Bienvenidos a Cataluña
Viajar en tren es uno de los grandes placeres que uno puede experimentar en su viaje. La emoción de llegar al destino hace una perfecta simbiosis con esa calma que produce el sutil balanceo del vagón.
Al mirar por la ventana, el trayecto nos regala paisajes de postal, teniendo que luchar contra nuestros parpados para no perdernos ni un solo segundo de ese amanecer, ese atardecer o esa mezcla de infinitas tonalidades de un otoño muy latente.
Una vez en el destino, son muchas las cosas por descubrir, por conocer y de las que aprender. Las capitales catalanas están conectadas a no más de 40 minutos de trayecto entre ellas y a menos de 3 horas de muchas de las ciudades de la península. No se nos ocurre mejor escapada de fin de semana. ¡Empecemos!
Casa Navás, Reus 
Casa Vicens – La primera casa de Gaudí, Barcelona
Conquista las tierras de Lleida
Rodeada de grandes extensiones de árboles frutales y atravesada por el río Segre, Lleida se levanta encima de sus profundas raíces históricas como una ciudad moderna y dinámica, tanto desde el punto de vista comercial como cultural y patrimonial.
Sigue la ruta arqueológica por los vestigios romanos y medievales, visita la catedral sumergida del depósito del Pla de l’Aigua o, para los más activos, realiza una salida en bicicleta por el parque de La Mitjana.
Al caer la tarde, disfruta de un momento mágico en el conjunto monumental de la Seu Vella y el Castillo del Rey Castillo del Rey (antigua Suda musulmana), pues desde el baluarte de la Reina se puede contemplar una amplia panorámica de la ciudad y de las tierras que la rodean. Campos que se extienden hasta el horizonte; todo un vergel de frutas y hortalizas que acabarán en las recetas de muchos platos de la gastronomía leridana. El aceite de oliva de la D.O.P Les Garrigues, los embutidos y esas peras que en Lleida tiene Denominación de Origen Protegida, pero, sobre todo, no te vayas sin descubrir la manera más tradicional de comer los famosos caracoles de Lleida, asados “a la llauna”, sobre la plancha metálica con asas dispuesta directamente sobre las brasas.
Vuelve a los inicios entre ruinas romanas en Tarragona y tómate un vermut en Reus
Ver la salida del sol en Tarragona, ciudad Patrimonio de la Humanidad, desde la barandilla forjada conocida como Balcón del Mediterráneo es, sin duda, uno de esos perfectos amaneceres, con el sol retomando el horizonte marino, que un día vieron los romanos que ocuparon las gradas del anfiteatro que tienes a tus pies.
Descubre todas aquellas construcciones que se fueron levantando con la piedra de la cantera del Mèdol: el circo romano, el pretorio y las murallas que hoy visitamos son solo una muestra de todo lo que hay por descubrir. Y no olvides acercarte al pintoresco barrio marinero de la ciudad, El Serrallo, donde encontrarás ejemplos de la mejor cocina marinera con la más pura esencia de la zona, basada en los productos frescos del mar.
Desplázate hasta la cercana ciudad de Reus, santuario de la arquitectura modernista, no solo por sus edificios emblemáticos, sino también por la huella personal que dejaron maestros como Domènech i Muntaner. La ruta del modernismo recorre 26 importantes edificios, como la Casa Navás, la Casa Rull, la Casa Gasull y el Instituto Pere Mata obras de Lluís Domènech i Montaner, o la Casa Anguera de Pere Caselles.
Pero recuerda, se puntual a la tradicional hora del vermut y conoce su historia: Reus fue, junto con París y Londres, una de las tres ciudades que regulaban el precio de esta bebida macerada. No te pierdas el vermut y cocina en el Reus modernista, el cual abre una ventana hacia la gastronomía reusense de la época, así como la vida y alimentación de los obreros y de la burguesía, sus cafés, restaurantes, tiendas, mercados y fábricas de alimentación, a través de las recetas y el aguardiente de la ciudad.
Descubre la oferta gastronómica y cultural de la tradicional pero cambiante Barcelona
Y es que Barcelona, la gran ciudad del Mediterráneo, siempre tiene algo nuevo que ofrecer, algo nuevo por descubrir.
Las calles de juventud de Picasso muestran una Barcelona íntima y bohemia, de pequeños y encantadores negocios. La Ciutat Vella y el barrio Gótico, nos hablan de la Barcelona de los gremios y que todavía muestra las trágicas huellas de la Guerra Civil en alguna de sus paredes. La Barceloneta, con sus bodegas y bares de tapas, la ropa tendida y el sabor a rumba catalana. La artesanía del trencadís, la cocina catalana más tradicional o recorrer la ciudad a través de la inspiración de grandes páginas de la literatura. Hay una Barcelona (o varias) para todos y cada uno de nosotros.
Caracoles a «la llauna« 
Vermut, Reus 
Brunyols creativos en forma de triangulo
Una ciudad que siempre ha estado vinculada al arte en todas sus manifestaciones, ahora nos trae dos muestras del más puro arte contemporáneo e innovador. Desde el pasado mes de octubre puedes disfrutar en Barcelona, concretamente en el Palau Cervelló, de las obras de Banksy, Basquiat y Warhol, ¿su nombre?, Moco Museum: un lugar donde encontrarse con obras icónicas de renombre mundial y el moderno arte digital inmersivo con tecnología NFT.
Además, de noviembre a marzo, sumérgete en la nueva exposición inmersiva de Van Gogh, acogida en la Cúpula del Centro Comercial Las Arenas, una muestra que transita por el mundo sensorial del artista a través de la mirada particular de su obra.
No nos olvidamos de la gastronomía, desde los mercados y museos gastronómicos hasta talleres de cocina, pasando por la cofradía de pescadores, donde ver la llegada de las barcas de pesca y asistir a la subasta en la lonja. Resulta interesante ver cómo ha sobrevivido la actividad pesquera en una metrópoli tan grande, con una cofradía capaz de servir pescado fresco a la gran demanda de restaurantes de la Barceloneta. En definitiva, la gastronomía, los mercados y su gente son, sin duda, una parte muy importante de la vida diaria de los barceloneses.
Un paseo por los 5 sentidos en Girona
Girona tiene el encanto y la magia de las grandes ciudades, pero la esencia acogedora de los pueblos. Disfruta de una amplia oferta turística, cultural e histórica, y de una rica vida social, con eventos y fiestas populares de gran interés durante todo el año.
La ciudad conserva un barrio antiguo medieval que sube, a través de las callejuelas del casco antiguo, hasta la imponente catedral. En el río, nos espera la estampa más famosa de Girona, las coloridas casas del Onyar que, junto a los diferentes puentes que la acompañan, le dan ese toque tan romántico a la ciudad que hace que la quieras visitar una y otra vez (o que no te quieras ir de ella).
En la ciudad existe una gran oferta de restaurantes, con un amplio abanico de cocinas: desde cocina de mercado, de autor, vegetariana hasta catalana o casera, para que puedas conocer Girona a través de sus sabores. No te pierdas el xuixo de crema, los brunyols, los quesos acompañados con un buen pa amb tomàquet y aceite de oliva, la fideuà o los helados que elabora el pequeño de los hermanos Roca.
Si te hemos convencido, Girona Food Tours ofrece experiencias gastronómicas que van más allá de la cocina, para conocer los encantos de esta ciudad y la historia de la tradición culinaria catalana. Combinando la cata de alimentos y productos de la tierra con explicaciones sobre el entorno y la gastronomía: aceites, vinos, cavas, platos tradicionales, embutidos, dulces y otros productos típicos de nuestra tierra, y del entorno donde se encuentran.
Las casas coloridas del río Onyar 
Teatro-Museo Dalí, Figueres
Déjate seducir por el surrealismo de Dalí en Figueres
El universo de Dalí en el Empordà marca el inicio de un viaje que nos lleva por la sugerente mente del genio de sublimes bigotes. Figueres, ciudad natal de Salvador Dalí, se convirtió en musa y capital cultural, pues además del pintor surrealista, la ciudad ha visto nacer a numerosas personalidades y tradiciones, como el ingeniero e inventor Narcís Monturiol, artífice del primer submarino (el Ictíneo, 1909) o la popular danza catalana, la sardana.
Al son de las campanas de la iglesia de Sant Pere de Figueres, uno de los espacios vitales del artista, adéntrate en el Teatro-Museo Dalí, donde quedarte fascinado por los mil detalles escondidos en cada una de sus pinturas. Sigue conociéndole en el Museo del Juguete, para llegar al Dalí más inocente y puro a través de una exposición sobre sus años de juventud, y finaliza con el Dalí más provocador en su espacio Dalí-Joyas, una inigualable colección de sus diseños para joyería.
Acércate a la Rambla, el centro social de la ciudad, donde Dalí solía pasear a sus exóticas mascotas, y siéntate en algunas de sus tradicionales cafeterías, con suelos embaldosados y mesas de mármol. Y, por qué no, no dejes de visitar el Museo del Empordà, una visita igualmente vinculada al arte, especialmente al comarcal y al contemporáneo.
Cataluña es un destino seguro y preparado para recibir visitantes. Tiene implementados unos protocolos sanitarios anti Covid-19 sólidos en el sector turístico que permiten controlar y vigilar el cumplimiento de las medidas de seguridad para evitar la propagación del virus en este ámbito.
Los alojamientos y servicios turísticos de Cataluña aplican estrictos protocolos de seguridad anticovid-19, pues la máxima prioridad del ecosistema turístico catalán ha sido, es y será, la seguridad de las personas.
