Madrid es una de las capitales europeas más demandadas a la hora de realizar una escapada. Ya vivas fuera o dentro de nuestras fronteras, te aseguramos que pasar unos pocos días en esta ciudad merece la pena.
No sabemos si será por su belleza, relacionada con su historia, por sus gentes o por su comida. Pero la verdad es que Madrid siempre consigue hacerse un hueco en los corazones de quienes la visitan, aunque sea solo durante un periodo corto como el de un fin de semana.
Si es tu primera vez en la capital, ya te avisamos de que, si te lo tomas en serio y escoges hoteles en Madrid que estén relativamente céntricos, es posible que te de tiempo a ver prácticamente todos sus monumentos. Sin embargo, empaparse del ritmo de la ciudad ya son palabras mayores. El ambiente de sus terrazas, una noche por los mejores karaokes o pubs e incluso una mañana de domingo paseando por el parque de El Retiro, no son objetivos fáciles de lograr en unos pocos días.
Alojarse en Madrid
Ya hemos hablado de que la mejor opción para verlo todo y no depender del transporte público en todo momento es alojarse en el centro de Madrid. Lo que pasa es que el distrito centro es muy grande, abarca mucha ciudad. Por ello, aquí te dejamos una serie de «localizaciones» que puedes valorar a la hora de buscar dónde dormir en Madrid.
Puerta del Sol. A pesar de no ser una de las zonas más baratas donde alojarse, sí es cierto que dormir por aquí, cerca del famoso km 0, te permitirá ahorrar en otras cosas como el transporte público. Es literalmente el centro de Madrid y las calles que salen de ella están llenas de tiendas, restaurantes y bares. Esta última opción es ideal para disfrutar de una cerveza al sol. También, muchas discotecas y pubs tanto allí mismo como por los famosos barrios de Chueca o Malasaña.
La Latina. Si vas a Madrid y no pasas por este barrio, entonces no podemos decir que realmente hayas visto la ciudad y todo su atractivo más allá de los monumentos. De nuevo muchos bares en los que disfrutar de una copa y, por tanto, mucha vida los fines de semana. Para comer una buena tortilla de patata, este también es el sitio. ¿Te animas a decirlo qué sitio crees que es en los comentarios?
El barrio de las Letras. También conocido como Huertas, recibe el nombre de Barrio de las Letras por la cantidad de escritores que vivieron en él. Sin duda, por esta zona merece mucho la pena hacer un tour y exprimirlo al máximo. Muy conocido porque los fines de semana se llena de ambiente, está también muy cerca de la Puerta del Sol. Es decir, de las zonas más turísticas.
La Gran Vía y la Plaza de España. Muy cerca del famoso Km 0 del que hablábamos antes, la Gran Vía alberga el 50% de toda la vida que existe en la capital. Llena de tiendas, restaurantes y muchos teatros y cines, allí encontramos mil opciones para entretenernos. Además, el Palacio Real no queda lejos. Y ya si hablamos de Plaza de España, reformada hace muy poquito, te quedarás sin habla. Alojamientos de ensueño a los que puedes acceder solo a tomar una copa si quieres, una plaza que bien merece la pena disfrutar con un buen picnic y mucha, mucha alegría.
Qué ver en Madrid
La Plaza Mayor. De estilo castellano, no importa si vas a primera o a última hora del día que siempre hay gente. Es uno de los centros neurálgicos de Madrid y de los lugares más emblemáticos. Por allí tienes que pasar sí o sí y, cualquiera de sus salidas (o entradas), lleva a una serie de calles estrechas por las que no hay mejor opción que perderse. ¡Ah! Y no te olvides: la Plaza Mayor mejor con un bocadillo de calamares.
Pasear por la Gran Vía. Incluso aunque no quisieras, te verías obligado a pasar por ella. La calle, de las más transitadas de Madrid, une varios de los puntos turísticos que sí o sí recorrerás y da paso a calles como la famosa Fuencarral, llena de tiendas de moda. ¡Algunas de las marcas más exquisitas están allí!
Palacio Real. Puedes admirar el palacio real más grande de Europa occidental desde fuera o embarcarte en una visita por su interior. Construido en el siglo XVIII, te aseguramos que su visita merece la pena y los precios no son elevados.
Museo del Prado o Museo del Reina Sofía. Ambas opciones nos encantan y, si eres amante del arte y tuvieras tiempo para disfrutar de los dos, casi que mejor. El primero, que cuenta con la colección de pintura europea más importante del mundo, es el segundo más visitado de España. Y el segundo, el Reina Sofía, alberga obras de muy reconocido prestigio, como el Guernica de Pablo Picasso.
Templo de Debod. Aunque se puede visitar por dentro, la gente suele recomendar (nosotros incluidos) el atardecer que se avista desde este punto de Madrid. Este templo, que está en Madrid desde 1968, tiene más de 2.200 años de historia. Su origen, egipcio. Así que si te gusta esta cultura, anímate y disfruta de una visita por su interior.
¿No sabes qué comer en Madrid?
Qué difícil es hacer una lista corta de recetas de un lugar cuando has probado todos los platos y no hay uno no esté bueno. Sin embargo, aquí no podemos ponerlo absolutamente todo, aunque solo sea porque en tu escapada no podrás probar todos los platos. Estos, eso sí, son nuestros imprescindibles.
Cocido madrileño. Cocido hay en todos lados, pero cada uno es diferente en función del lugar de España en que lo comas. En el caso del madrileño, que a mí me encanta (aunque puede que influya el hecho de que sea madrileña), te encontrarás una sopa con fideos, garbanzos, carne y verduras. Estos sin los ingredientes. Sin embargo, se consumen por separado. Por un lado la sopa, a la que hay quien le añade los fideos, y por otro la carne con lo demás. Yo soy más de disfrutar de los garbanzos en esta segunda parte.
Callos. No adecuados para todos los gustos, aunque al menos te invitamos a probarlos. Para quien no lo sepa, son tripas que se suelen guisar con morcilla, chorizo y jamón.
Bocadillo de calamares. Aunque hay quien defiende que no es un plato típico de Madrid porque en la capital no hay mar para pescar calamares, la verdad que sí es (a nuestro entender) una de las recetas más clásicas que encontramos por el centro. Además, son muy sencillos de elaborar, ya que solo hace falta pan y unos calamares rebozados. Por supuesto, con una buena cerveza de acompañamiento.
Huevos estrellados. También conocidos como huevos rotos, seguro que estás pensando en que los has comido en otros lugares. Y no vamos a decir que no. Sin embargo, es interesante que sepas que se rumorea que su origen está en la capital de España. Así que, ¿por qué no probarlos? No creo que haya nadie que se resista a esta receta.
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