Salida.- Tornavacas.
Fin.- Jarandilla de la Vera
Dificultad de la Ruta de Carlos V: Media
Distancia: 23,5 Km
Duración: 8 horas aprox.
La Ruta de Carlos V parte de la plaza de Tornavacas se desciende a la Ermita de Santa María, pasando a la vertiente izquierda del río Jerte. Continuamos paralelos a su cauce por un camino señalizado con marcas rojas y blancas, que nos conduce al Collado de las Losas después de pasar por un frondoso bosque de castaños.
Al llegar al Collado de Las Losas, comenzamos el descenso por un camino a tramos enlosados, que llega al Puente Nuevo y que cruza la Garganta de la Serrá. Esta, al unirse más abajo con la de Las Yeguas forman la Garganta del Infierno, conocida por «Los Pilones». En el Puente Nuevo, el entorno y la subida al Cerro de la Encinilla, invitan al descanso. En 30 minutos se recuperan fuerzas para comenzar nuevamente la marcha. El camino, desde el Puente, asciende lentamente para llegar al Collado de la Encinilla (1.592 m.). Ya en lo alto podemos ver el Puerto de Las Yeguas y la Garganta que lleva su nombre.
La travesía continua en tramos por un camino desdibujado y cruzado por pequeños cauces de agua. El Collado de Las Yeguas, con sus 1.479 m., es un auténtico mirador de La Vera, donde apetece descansar y recuperar fuerzas para el descenso. Ya recuperados, comenzamos el descenso por un camino de piedras sueltas que, en zig-zag, nos lleva a la Gargarta Yedrón. En este lugar las cristalinas aguas invitan a detenernos. Un refrigerio hará más llevadera la culminación de la ruta.
Desde la Garganta, continuamos faldeando por la ladera hasta llegar a un bosque de castaños que, con las luces de la tarde, se viste de colores. La Ruta de Carlos V cruza la carretera que une Guijo de Santa Bárbara con Jarandilla. Subiendo unos metros por la carretera recuperaremos el camino que nos llevará, algunos kilómetros más abajo al final del recorrido, en Jarandilla. En Jarandilla ponemos punto final a la andadura (23,5 Km. aprox.) que nos habrá ocupado entre 6 horas a 9 horas, dependiendo de las paradas que se realizen y del paso más o menos relajado.
«Ya no franquearé otro puerto que el de la muerte»
El 11 de noviembre Carlos V llegó a Tornavacas, una hora después de haber anochecido. El Emperador tomó truchas para cenar. No en vano, el Valle del Jerte es una de las mejores zonas trucheras de Extremadura. La ruta tiene una duración aproximada de 8 horas.
No podía hacerlo en litera, sino en silla de manos, y en ocasiones, a cuestas de los propios lugareños. Pero lo haría. Y por el entonces llamado Puerto Nuevo.
Carlos V escogió este itinerario en lugar de ir por Plasencia en dirección a Jarandilla. Al llegar al Collado de las Yeguas exclamó: «Ya no franquearé otro puerto que el de la muerte».
Más información
Si se pernocta en la localidad o alrededores antes de hacer la Ruta de Carlos V, el viajero tendrá la oportunidad de degustar no sólo este plato, sino también la variada y excelente gastronomía de la zona.
Archiconocidas son sus cerezas, el licor de éstas, el denominado kirsch o las morcillas patateras, entre otros productos.
El grado de dificultad del itinerario de la Ruta de Carlos V es medio. Es una ruta larga pero merece la pena. Las ganas de hacer un alto en el camino para divisar el paisaje o bañarse en sus cristalinas aguas será una constante a lo largo del recorrido.