Un camino a través de las huellas celtas bercianas. Un recorrido plagado de historias y valles de singular belleza. El Valle de Ancares o el Valle de Fornela son algunos de los destino de este «paseo».
La ruta comienza en San Andrés de Espinareda, cabeza de ayuntamiento, con 3.192 habitantes. Su origen está ligado al monasterio benedictino de San Andrés de Espinareda, que se remonta al siglo X. El edificio primitivo sufrió graves incendios y buena parte de lo que podemos apreciar hoy se debe a las remodelaciones.
En relación a la iglesia, muestra una fachada neoclásica monumental con dos esbeltas torres a los lados. Además, destacan en su interior el retablo mayor de estilo prechurrigueresco y una Virgen Gótica.
Fabero es la capital de la zona y cabeza de una importante cuenca antracitera. Esta comenzó a explotarse después de la Primera Guerra Mundial, aunque tuvo su auge entre los años 40 y 60. Esta localidad apena llega a los 6500 habitantes, pero su economía sigue centrada en la minería.
Alrededores de Fornela
Un aliciente para visitar Fornela es Castro de Chano, situado a la salida del pueblo que lleva el mismo nombre. La excavación del mismo fue realizada entre 1989 y 1993. Además, sitúan los restos entre los últimos años del siglo I. En dicho yacimiento se aprecian, en buen estado de conservación, cabañas de planta circular construidas con lajas de pizarra.
Castro de Chano 
Balauta 
Burbia
Si nos alejamos un poco, en Pereda también existen vestigios de minas de oro, con galerías que estuvieron en explotación hasta comienzos de este siglo. A la salida de Tejedo, en dirección a Balouta se encuentran los restos de una ferrería construida a finales del s. XIX. Y un poco más allá, la ermita de la Magdalena en la que se celebra una popular romería el último domingo de julio.
Tras coronar el Puerto de Ancares emerge Balouta, que cuenta con numerosas pallozas en buen estado. Podemos decir incluso que algunas han sido convertidas en museos.
Si seguimos la ruta hasta Burbia y Campo del Agua, podemos realizarla desde Vega de Espinareda o Campo del Agua y Burbia. En este último encontramos campings y albergues. Asimismo, destaca porque en él se puede practicar senderismo o mountain bike.
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