Con la recuperación económica a la vista, son muchas las oportunidades que ofrecen los mercados a los ahorradores que quieren maximizar sus beneficios. Empresas tecnológicas, materias primas o divisas son algunas de las áreas en las que aún es posible sacar beneficios.
Las oportunidades de ganar dinero con inversiones en los mercados financieros están presentes. Solo hay que tener la experiencia y el buen ojo para ver las oportunidades. Da igual que estemos en un entorno económico incierto y marcado por el impacto de la COVID-19. Siempre existen oportunidades de inversión que los ahorradores deben esforzarse en conocer para poder rentabilizar al máximo su capital.
Después de un 2020 especialmente turbulento en la economía mundial, este año parece que va a ser el del inicio de la recuperación y el alza económica de la mayoría de los países del mundo.
Por ello, aún hoy, los mercados financieros ofrecen excelentes oportunidades de crecimiento si el inversor está atento a las oportunidades que surgen. Unas oportunidades que, aunque parezca lo contrario, están en una multitud de industrias y sectores. En concreto, el mercado de las materias primas sigue siendo una buena opción, el oro ha ganado posiciones y siempre es una elección que, a largo plazo, ofrece buenos rendimientos aunque haya épocas de caída; las acciones en bolsas mundiales siempre están presentes, con la industria tecnológica al alza; y el mercado de las divisas también está en auge gracias al impacto de las monedas digitales.
Y es precisamente en el mercado de divisas donde se puede apreciar que existe una importante posibilidad de generar beneficios por medio de la comercialización de las monedas a través de un broker de Forex, que facilita que cualquier particular pueda empezar en este tipo de mercados sin necesidad de contar con la intermediación de una entidad financiera.
Invertir en Forex o en divisas consiste, básicamente, en comprar una divisa y vender otra, por lo que se cotiza en pares. Los inversionistas operan sobre los movimientos alcistas o bajistas del precio de un par de divisas con el objetivo de obtener beneficios. Al igual que el resto de acciones de bolsa, esta práctica puede resumirse en comprar barato y vender más caro, obteniendo una ganancia que resulta de la diferencia de estos precios.
Por tanto, los inversores deben tener en cuenta la evolución de las diferentes monedas, en especial las más importantes, para saber en qué momentos comprar. En la actualidad, el dólar parece que no termina de remontar a pesar de los constantes estímulos que está dando el Gobierno de Biden. El euro, por su parte, equivale a 1,19 dólares en estos momentos. Por su parte, la libra está en mínimos después de la salida de Reino Unido de la UE con el Grexit y con un impacto limitado de su plan de vacunación.
Monedas digitales
Estos datos habrá que estudiarlos a la hora de invertir en Forex. Además de estas monedas “tradicionales”, también es posible invertir hoy en día en las denominadas monedas virtuales o digitales, que han llegado para quedarse y que están revolucionando el sistema económico mundial. Como ejemplo, el Bitcoin, la moneda digital más popular, tiene una valoración por encima de los 40.000 dólares y vive uno de sus mejores momentos.
Desde que nació en 2009, el valor del Bitcoin ha pasado por distintas valoraciones que han subido y bajado en función del mercado, alcanzando su máximo en los 49.000 dólares y que está arropado por empresarios como Elon Mosk, que recientemente compró $1,500 millones en Bitcoin a través de su empresa Tesla y que, además, ya permite la compra de sus vehículos eléctricos con esta moneda digital.
Este aumento del bitcoin no ha ido en solitario, ya que otras como Ethereum también alcanzó este año un máximo histórico al superar los 1.800 dólares, un episodio que, según los expertos, ha recordado a lo sucedido en 2017 con el lanzamiento de bitcoin en el mercado de futuros. Cada vez es más común el uso de dinero efectivo para utilizar otro sistemas de pago digitales, lo que está propiciando el auge de este sector de divisas digitales.
Tanto que los gobiernos nacionales y bancos centrales están apostando por estas monedas. Así, por ejemplo, el Banco de Japón anunció que inicia sus pruebas con el yen digital, mientras que el Banco Popular de China ya está en pruebas. El Banco Central Europeo, por su parte, también está valorando la posibilidad de entrar en este tipo de proyectos.
En este sentido, es destacable que cerca del 80% de los bancos centrales están uniéndose a la investigación, experimentación y desarrollo de este tipo de proyectos. Además, un 20% de estas instituciones a nivel mundial están pensando en lanzar una CBDC comercial a medio plazo.