El mundo de la cosmética evoluciona a pasos agigantados. El gel limpiador facial, el ácido hialurónico, los productos para evitar la caída del cabello, las máscaras de pestañas y los correctores multiusos son algunos de los ítems más solicitados entre las mujeres. Sin embargo, no todos los productos son igualmente efectivos. Algunos de ellos pueden dañar la piel. Por esta razón, los cosméticos que se utilizan para el cuidado y la higiene corporal han de fabricarse con la homologación correspondiente, la cual nos asegurará que el producto que aplicamos sobre nuestra piel será respetuoso para con la misma.
A fin de asesorarte mejor, especialmente de cara a este verano de 2022, en el que las mascarillas pueden quitarse ya con más flexibilidad, te ofrecemos información sobre elizabeth arden y los Polvos Compactos, una empresa de cosmética respaldada por una fuerte base científica y un producto dentro de la industria cosmética que protegerá tu piel de posibles agresiones externas a la par que corrige ciertas imperfecciones.
Elizabeth Arden: la ciencia de la belleza
Floren Nightingale Graham abrió su primer salón de belleza en la ciudad de Nueva York, a principios del siglo XX. La premisa de su negocio partía de que la belleza no ha de ser únicamente maquillaje, sino que ha de tener una base científica y natural que permita potenciar la apariencia física original de cada mujer. Elizabeth Arden partía de la base de que toda mujer es por sí misma bella. A partir de ello, creó productos que no sólo contribuyeran a potenciar dicha belleza natural, sino que también, a la par, mantuvieran el cuidado de la piel. De este modo, introdujo el concepto de Total Beauty, cuyos preceptos se asientan sobre la base de que la belleza no implica sólo una cobertura de maquillaje, sino que ha de nutrir la piel, para lo que Elizabeth aplicó conocimientos científicos en las formulaciones de sus productos. De hecho, uno de los ítema que popularizó fue un lápiz labial rojo que las mujeres que servían en la armada en la Segunda Guerra Mundial lucían.Algunos de los acontecimientos en que fue pionera incluyen los primeros productos de maquillaje de ojos, los productos de belleza tamaño bolsillo (en ediciones para viajes) y el comercio de cosméticos mediante vendedoras itinerantes.
Entre los productos que su marca ofrece encontramos pintalabios, bases de maquillaje, cremas faciales, sérums antiedad, fijadores labiales, geles de ducha, desmaquillantes, perfumes… Pero, concretamente, uno de los productos que esta año 2022 destacan son los polvos faciales, sobre los que hablamos a continuación.
Los polvos faciales marcan tendencia
Los polvos faciales se utilizan para sellar y fijar el maquillaje sobre la piel. Además, contribuyen a eliminar brillos indeseados, mientras unifican el tono de piel, lo que favorece a la uniformidad del mismo sobre el rostro.
Hay varios tipos de polvos faciales. Seguidamente te explicamos en qué consisten los polvos compactos y en qué se diferencian de los habituales polvos faciales sueltos.
Polvos compactos: libres de aceite
Los polvos compactos son de estructura semi sólida. La mayor parte de esta clase de polvos faciales se fabrican libres de aceites, a diferencia de los polvos sueltos, de estructura más ligera precisamente por la incorporación de aceites en su composición.Los polvos compactos pueden ser traslúcidos o de color, en función de la piel.En cualquier caso, se trata de polvos de potente fijación, con lo que el maquillaje permanece durante más tiempo. Además, difuminan y proporcionan suavidad extras. Por otro lado, debido a su composición libre en aceites se recomienda especialmente para aquellas pieles más grasas y con imperfecciones en la zona T (área de la cara que comprende la relación frente, nariz y barbilla). En cuanto a la base, pueden aplicarse con o sin fondo de maquillaje. Respecto a esto último, habitualmente se aplican sin la base cuando se pretende hacer de ellos un uso diario, con un efecto más natural que pase desapercibido en el día a día. Si bien sus ventajas, como observamos, son múltiples, conviene tener presente que de hacerse un uso abusivo y no moderado pueden acentuar las líneas de expresión facial, lo cual distaría del efecto deseado natural y rejuvenecido.Algunas de las recomendaciones que convienen tener presente son:
- Evitar esponjas aterciopeladas
- Decantarnos por un tono bien similar al de nuestra piel
- Aplicar mediante la esponja con toques delicados hasta lograrlo difuminar por completo, o recurrir a una brocha con la que extenderlo en cara y cuello
Diferencia con los polvos sueltos
Si hemos dicho anteriormente que los polvos faciales compactos son recomendables especialmente para pieles grasas, los polvos sueltos lo son para pieles normales o secas, ya que en estos casos aportan más luminosidad. Por otro lado, es recomendable aplicarlos habiendo previamente extendido una base en el rostro. Con este último truco el maquillaje podrá permanecer más tiempo.