De Almería se cuenta que fue fundada por los árabes en el año 955 cuando Abd al-Rahman III se preocupaba por la vigilancia de la costa a fin de evitar desembarcos enemigos. A pesar de los años transcurridos, el legado musulmán domina la imagen urbana de la ciudad. La Alcazaba, una de la mayores fortalezas medievales de Andalucía, preside todavía la ciudad sobre un alto cerro. Destaca en ella el Palacio de Almotacín, el más grande y mejor de los conservados del periodo taifa. Completamos el itinerario cultural visitando la Catedral, la Iglesia de San Pedro o la de San Juan, entre otros edificios. En Almería es famoso el tapeo en los múltiples bares de la ciudad; tascas, tabernas y mesones para disfrutar el arte de comer de pie.
Para acabar de conocer Almería, debemos visitar el Cabo de Gata. La transparencia de sus aguas es la característica esencial de toda esta franja marítima. Ideal para descansar e iniciar nuestra ruta con fuerza antes de adentrarnos en los paisajes y costumbres serranos. Por la carretera nacional 324, a unos 10 km. de Almería, nos conduce la ruta hasta Benahadux, junto al río Andarax. Esta villa fue en época andalusí una alquería y era conocida como la aldea de los Banu Abdus, grupo árabe que se instaló en ella. A un km. de distancia, en el Cerro del Chuche, existen restos de un antiguo poblado árabe.
Hay que acercarse a los Baños de Sierra Alhamilla, rodeados de higueras y palmeras; Pechina, yacimiento arqueológico y Los Millares son dignos de una visita. Siguiendo el camino iniciado en Almería, llegamos a Alhama de Almería, lugar de entrada a la Alpujarra. El patrimonio andalusí que existe en esta villa está relacionado con el agua, bien por la utilidad medicinal en los baños, bien para su aprovechamiento en la agricultura. Los restos de los Baños Arabes se conservan en el actual Hotel-Balneario de San Nicolás. También podemos visitar la Cruz de Arriba. En el Cerro de la Cruz, está la fortaleza nazarí de los Castillejos, con línea visual directa con las fortalezas de Marchena y el Castillo de Mondújar.
Por el camino que atraviesa la Alpujarra de Este a Oeste, frente a la Sierra de Gádor y en las estribaciones de Sierra Nevada, aparece, dominando el Valle del Río Andarax, la Villa de Laujar de Andarax, distante de Almería 69 km., en la ruta de la naranja y la uva. Esta fue la villa elegida por Boabdil, el último rey nazarí, para establecer su residencia antes de partir para el exilio. Dentro del núcleo de población se encuentra un enorme lienzo de muralla de mampostería y cinco torres. El Nacimiento del río Andarax es un bello paraje natural en las cercanías del casco urbano.
Seguimos con dirección a Ugíjar cruzando la Rambla de Paterna y el río de Bayárcal, llegando a la provincia de Granada. Se llamó por los andalusíes «Uxixar de Albacete», que viene a significar `llanura’, y el enclave en el que se situa hace honor a su nombre. Debido a su inaccesibilidad, quedó como un reducto musulmán en la Alpujarra. Aún se pueden ver restos del que fue uno de los más importante castillos de la Alpujarra, el Castillo de los Escariantes. Contaba este castillo con un aljibe de grandes dimensiones y ha aparecido en él cerámica que demuestra la ocupación del castillo desde los primeros tiempos de la presencia árabe en la Península. Podemos visitar también la Ermita de San Antón, la Iglesia de Ntra. Sra. del Martirio, el Pozo de la Virgen o la Fuente del Arca. Cerca está Laroles, capital del municipio de Nevada, integrada dentro del Puerto de la Ragua, estación de esquí nórdico.
Por la carretera C-332 llegamos a Válor. La herencia andalusí se puede ver en la fisonomía de este pueblo de calles estrechas y retorcidas, donde las viviendas se cubren de la típica lana alpujarreña. La planta baja de las casas se dedica a corrales y pajar, la planta intermedia dedicada a vivienda. El piso superior se utiliza como granero, mientras el terrao sirve para secar al sol castañas, maíz, hortalizas e higos.
Construido sobre el río Valor, el Puente Tableta, sirve para cruzar el camino real que une Almería con Granada. Entre las poblaciones de Válor y su anejo Mecina Alfahar, en el lugar conocido como El Tejado, está el Castillo de Válor, del que se conservan restos de una muralla de varias decenas de metros de longitud.
Muy cerca de Válor se encuentra Yegen, uno de los pueblos más internacionales de la Alpujarra. Fue el escritor inglés Gerald Brenan quien cantó las excelencias de este lugar en su famosa obra «Al sur de Granada», fruto de su estancia en tierras alpujarreñas entre 1920 – 1934. La casa que habitó, conocida hoy como Casa del Inglés, es hoy visitada por turistas.
Tras admirar el grato paisaje de Mecina Bombarón y Bérchules, atravesamos los valles del río Mecina y el primer tramo del Guadalfeo y por la comarcal 332 llegamos a Juviles a través de un frondoso bosque en el que destacan especies como el eucalipto, castaño y nogal. Sobre un cerro a unos 1.000 m. de altitud se encuentran los restos del Fuerte de Juviles.
Haciendo un tortuoso recorrido entre barrancos y cortados de acentuada pendiente, nos adentramos por el valle del río Trevélez, que nos conduce hacia la localidad del mismo nombre. Trevélez ha guardado la fisonomía de época musulmana con su división en tres barrios: alto, medio y bajo, acentuada por los soportes o tinaos, que a veces comunican las casas entre sí. Se puede realizar una bonita excursión hacia el nacimiento del río Trevélez, en Siete Lagunas a unas tres horas a pie.
Bordeando el cerro del Jabalí con 2.171 m. de altitud, salimos de Trevélez con dirección a Pitres, tras pasar por Pórtugos y atravesar el río Bermejo, que se une con el río Trevelez entre las próximas localidades de Ferreirola y Mecina-Fondales.
En el término de Pórtugos merece la pena pararse en Fuente Agria, una fuente de aguas ferruginosas de cinco caños y que se despeña en una cascada de luz y color en el llamado «Chorrerrón». Para disfrutar a la sombra de los castaños hay una especie de merendero con mesas y bancos de piedra, en la Ermita de la Virgen de las Angustias.
El siguiente punto de destino de nuestra ruta es la Taha de Pitres que comprende los núcleos siguientes: Mecina Fondales, Ferreirola, Pitres, Capilerilla y Atalbéitar. Nos podemos asomar al profundo barranco excavado por el río desde el Puente de Mecina Fondales. Cerca están también los baños termales de Panjuila en Ferreirola.
En lo más alto del Barranco del Poqueira se encuentra Capileira desde donde se puede contemplar una hermosa vista de los pueblos de la taha o comarca. Podemos realizar un itinerario por el casco urbano y visitar el Museo Pedro Antonio de Alarcón.
Sigue la ruta hasta Bubión donde en Carretera s/n está la Villa Turística de Bubión, un apartahotel donde podemos pasar la noche y degustar platos variados de su carta: las gachas pimentonas, las migas, el choto al ajillo, la olla gitana,….
Situados de nuevo en la C-332, pasado Mecina Bombarón con dirección Ugíjar-Granada, se toma un desvío a la izquierda, que conduce al llano Albacete, donde está situado Cádiar a 916 m de altitud. Desde Cadiar, dando un paseo, llegamos al anejo de Narila, lugar donde fue coronado Aben Humeya, que conserva una casa y un olivo que rememora el acontecimiento.
Por la C-332, que por estos parajes tiene un trazado sinuoso, llegamos a Torvizcón, pueblo que toma su nombre de una planta, el torvisco, enclavado en un terreno salpicado de ramblas y barrancos. Existe un museo de costumbres agrícolas y de piezas de esparto, el Museo Góngora, situado en Arroyo Pozo, que se puede visitar durante todo el día.
Entre los ríos Chico y Guadalfeo se localiza Orgiva. Situada a 50 km. de Granada en un espléndido valle con olivos centenarios donde se asienta la ciudad. En 1839 Orgiva fue designada por la reina Isabel II como capital de la Alpujarra.
En Lanjarón terminamos nuestro camino por tierras alpujarreñas. Lanjarón es conocida de antiguo por la calidad de sus aguas, que además de haber consolidado una importante industria de envasado de agua mineral, la ha convertido en un enclave turístico y en balneario que de Marzo a Diciembre recibe, para tomar las aguas, a miles de personas procedentes de cualquier rincón de España y del extranjero.
Se conservan en Lanjarón los restos de un impresionante Castillo de época musulmana en la confluencia de los ríos Salado y Lanjarón. Dominaba por un lado el camino de acceso a la infranqueable Alpujarra y de otro el que comunicaba la capital granadina con la costa. Conserva todavía gran parte de su estructura en la que destacan una sólida muralla y algunas torres.
En pleno valle y ya en dirección a Granada la ruta nos conduce a Dúrcal, jalonada de naranjos y limoneros introducidos por los musulmanes en el Valle de Lecrín. En la zona oriental de la ciudad, en el lugar conocido como el Castillejo, sobre el valle del río Dúrcal, está el Peñón de los Moros. Su posición le permite dominar el camino de Granada, el de la costa, la población de Dúrcal con todos sus barrios y el cercano lugar de Cozvijar. Al pie del cerro del Zahor se encuentran los restos del Fuerte de Márgena, una alcazaba de época musulmana .
En Dúrcal podemos degustar platos típicos de la localidad como el puré de castañas, el remojón de naranjas agrias y patatas o las croquetas de chocolate en restaurantes como el Molino, un antiguo molino que ha sido adaptado como sede del Museo Gastronómico Andaluz. De Dúrcal pasamos a Otura en el que recomendamos visitar la alfarería de los Hermanos Ruíz, en la carretera de Otura a la Malahá. Utilizan tornos manuales y un horno moruno. A 5 km. de Otura, Dilar ofrece la posibilidad de realizar, siguiendo el cauce del río Dilar, excursiones de baja y media montaña para los amantes de este tipo de actividades. También se puede practicar la pesca deportiva de la trucha.
Ya cerca de Granada, la ruta discurre por varios pueblos como son Gojar, La Zubia, Cajar y Huetor Vega, todos ellos con bonitos paisajes hacia la sierra y Granada y con un rosario de ventas donde la gente de Granada suele acudir a comer los domingos y días de fiesta.
Como llegar:
Para llegar a la Alpujarra desde Granada se accede por la N-323 para tomar la carretera A-348, que conecta con Órgiva. Por la costa, el acceso se realiza a través de la N-340 hasta Motril, donde se toma la mencionada N-323.