Son muchas las personas que cuando se acerca la Navidad, especialmente la fiesta de fin de año, intentan hacer algo diferente a quedarse en su casa a festejarlo. De hecho, cada vez aparecen más planes y, todo ellos, muy originales y diferentes, por ejemplo: escaparse a una isla donde poder disfrutar de una temperatura totalmente diferente a la que implican las fiestas navideñas; ir a hacer deportes de agua como el surf o el paddle surf, entre otros; contratar un crucero y pasar esa noche en un barco disfrutando de todo tipo de lujos…
En fin, hay múltiples opciones y muy sugerentes, pero desde luego, una de las más demandadas durante esas fechas es la de ir a disfrutar de la montaña, y más , cuando esta se encuentra nevada y con las pistas abiertas para poder hacer el deporte que se le antoje a uno como, por ejemplo, esquiar. Si este te resulta un plan atractivo reserva la escapada de esquí en fin de año con Esquiades.com y prepárate para disfrutar.
Y es que pocos planes hay tan divertidos como este, por lo que si te atrae no te lo pienses más, entra en esquiades.com y haz tu reserva, encontrarás ofertas muy atractivas, para así poder empezar el año haciendo deporte en diferentes estaciones de esquí como: Formigal, Cerler, Panticosa, Candanchú, Baqueira Beret… Tienes múltiples posibilidades con precios cerrados, por lo que tu reserva de hotel más forfait te resultará más que económica.
Si ya has practicado anteriormente el esquí sabrás que este es un plan al que no puedes decir que no, pero si, por el contrario, nunca lo has hecho, te indicamos muchos de sus beneficios, para que así te animes a embarcarte en esta aventura:
– Si tienes una situación laboral o personal estresante, este deporte te vendrá como anillo al dedo, y es que gracias a su práctica conseguirás desconectar de tu rutina del día a día.
– Si estás harto de la ciudad y de la contaminación, esta experiencia te va a encantar, ya que disfrutarás de un aire limpio y fresco incomparable.
-Al ir en Navidad podrás vivir unas vacaciones inolvidables, ya que se crea un ambiente muy especial y sano donde estarás rodeado de gente con ganas de pasárselo bien. La noche de fin de año y también esa misma tarde, pasarás un buen rato, tanto en las zonas de descanso de las pistas como en el pueblo del lugar que hayas elegido para ir a esquiar.
-Si estás agobiado por el ruido tan típico de la ciudad, olvídate de él, porque podrás disfrutar de un silencio absoluto en las montañas. Al final de tu día de esquí, sube a una zona alta, espera a que cierren los remontes y aprovecha para hacer la última bajada con todo en silencio ¡Te encantará! Solo oirás el sonido de tus esquís deslizándose por la nieve.
-Si no sabes esquiar, no te preocupes, ya que en todas las estaciones se ofrecen clases de distintos niveles, además es un deporte muy agradecido, ya que notarás que cada día que lo practicas mejoras de manera muy significativa.
-Si sueles tener problemas de sueño olvídate de ello, ya que es tal el esfuerzo físico que se hace esquiando y tantas las horas que se practica, que cuando es la hora de dormir caes totalmente inconsciente hasta el día siguiente.
-Es muy normal que cuando se va a esquiar te pueda salir algún día malo, es algo que por mucho que estés atento a las previsiones climatológicas, te puede pasar. O sea, que no te sorprendas si un día no puedes esquiar hasta tarde o incluso a lo largo de todo el día, por culpa de diferentes factores, entre ellos: la ventisca, la lluvia, baja visibilidad, pistas con hielo, falta de nieve… En estos casos, no te preocupes, no hace falta que te quedes todo el día en el hotel, sino que la montaña te ofrece otras posibilidades como, por ejemplo, practicar esquí de fondo, es decir, podrás hacer excursiones por diferentes caminos por los que disfrutarás de un paisaje que te encantará, o bien, también puedes ir a hacer raquetas, otra excursión que disfrutarás y que no necesitas haber realizado anteriormente para ponerla en práctica. Además no te creas que con estas dos opciones no harás deporte, sino que ambas alternativas te sorprenderán, ya que ejercitarás mucho tus músculos al tiempo que gozarás de las vistas.
Y es que pocos paisajes hay tan bonitos e impactantes como el de ver las montañas y los árboles nevados, y hacerlo en Navidad es algo que has de hacer una vez en la vida, aunque seguro que si lo pruebas querrás volver a repetir. Seguro que empiezas el año con energía renovada, muchas más ganas, un sentimiento positivo maravilloso y, por supuesto, ¡Con agujetas!