Un buen plato no es aquel en el que hemos invertido infinitas horas y que lleva incontables elaboraciones. Es el que tiene sabor. El que es capaz de trasladarnos a un momento en nuestra vida, a un lugar o hasta una persona. Y eso solo se consigue utilizando ingredientes básicos de muy buena calidad, como es el aceite.
Cocinar es un arte. Y está claro que, para lograr el aplauso de los comensales, hace falta tener ese «don» que convierte tus platos, por sencillos que sean, en verdaderas obras de arte.
Sin embargo, la materia prima con la que decidimos elaborar nuestras recetas también es primordial. Es por ello que, cuando vamos a un restaurante de prestigio, el precio es tan elevado. No por el plato en sí, sino por la inversión que la empresa hace en productos de calidad. Uno de ellos, indispensable en prácticamente todos los platos, el aceite. Y en los últimos años, se apuesta, principalmente, por el aceite ecológico.
Aceite ecológico y sus beneficios
Cuando hablamos de productos naturales, como es el caso del aceite, y nos dicen que existe un «modelo» ecológico, nos puede llegar a costar entender dónde está la diferencia entre uno y otro. Aunque la verdad que es bastante sencillo. Basta con saber que el ecológico no utiliza productos químicos de síntesis como los fertilizantes. Una forma de proteger la biodiversidad y minimizar los daños al medio ambiente. Todo ello sin dejar de generar un aceite de buena calidad.
Con el uso limitado a los recursos naturales del sistema, el aceite ecológico cuenta además con una serie de beneficios, más allá de su impacto positivo en el medio ambiente, que nos gustaría destacar en este post. Entre ellos, el hecho de que esté libre de pesticidas y otros productos químicos. Esto favorece enormemente a nuestra salud, ya que esos productos pueden llegar a ser, a largo plazo, dañinos para nuestro organismo.
Recetas que marcan la diferencia gracias al aceite
Lo comentábamos al comienzo del artículo. De nada sirven unas manos prodigiosas en la cocina si no contamos con una materia prima de calidad. Puede que, en ciertas elaboraciones esto se note menos, pero en otras, contar con buenos productos es primordial.
Para que veas lo importante que es, por ejemplo, usar un buen aceite ecológico en la cocina, aquí te dejamos una serie de recetas en las que este ingrediente es indispensable y aporta mucho sabor.
Pan de oliva con especias. ¿No puedes vivir sin pan pero tampoco te gustan los procesados? Entonces esta receta es para ti. Tan solo necesitarás unos cuantos ingredientes (harina de fuerza, aceite, levadura seca, sal, agua y romero u otra especie de tu gusto) y mucha paciencia. Porque para que te salga rico y esponjoso, la masa tiene que reposar un total de dos horas y media entre elaboración y elaboración.
Tosta de aceite, salmón ahumado y aguacate. Esta receta es tan básica, que un aceite de mala calidad se nota enseguida. Por eso te recomendamos que, para esta receta uses productos de calidad y eches el aceite con una cucharilla pequeña para no pasarte con las cantidades y esparcirlo de forma homogénea.
Pescado frito. Este plato, típico del sur de España, tiene en el aceite su mayor aliado. Y es que los “fritos” requieren de una gran cantidad de aceite y son tan grasos que sin un buen aceite, el sabor se puede perder por completo. Aquí ya no vale solo con que sea de calidad. Aquí el aceite tiene que ser el adecuado.
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