Pueblos, y ciudades, urbes y caseríos, el territorio español y lusitano muestran miles de lugares donde sentarse a repostar, admirar la sabiduría popular que se ha erigida en el mejor de los arquitectos y donde las tradiciones se han conservado en todo su esplendor. Conocidas unas, pero imprescindibles volverlas a redescubrir, y esperando la admiración del forastero otras, al viajero tan sólo le queda convertirse en uno más. Andalucía Un pedazo de Manzanilla.
Aunque tiene que ver con vino, su origen etimológico está relacionado con antigua Maxalia romana. Este municipio en el que habitan unos 2.500 habitantes sorprende por la factura de sus edificios y por sus encaladas casas, siguiendo la tónica del blanco inmaculado de Andalucía. El vergel que constituye el patio de la Casa Rectoral, el sobrecogedor sentimiento que provoca la iglesia de la Purificación o el frescor de los parajes del término, son sólo algunas pistas para adentrarse en la onubense localidad de Manzanilla.
Aragón La cuna de Miguel Servet. Villanueva de Sigena, origen del ilustre científico, debe su caserío al Real Monasterio que se encuentra en las inmediaciones. Tanto la localidad oscense como el conjunto monacal, expoliado e incendiado durante la guerra civil, requieren una parada a fondo. Hoy día, del cenobio se conserva la iglesia, el claustro y algunas dependencias que han sido rehabilitadas. En el mismo pueblo, se erige un monumento dedicado a Servet y frente a él la iglesia parroquial. El Instituto de Estudios Sigenenses conserva parte de la casa natal del científico.
Asturias San Esteban de los Buitres. Situada en el occidente asturiano, en pleno Valle del Navia, dentro del concejo de Illano, esta aldea conserva una arquitectura de pizarra y piedra de gran belleza. Por la disposición de sus calles se advierte que en otro tiempo existió una antigua judería. Su etimología se debe a la cantidad de buitres que rondaban la zona. Desafortunadamente, hoy día apenas existen colonias, aunque está en marcha un proyecto de recuperación. Si a la arquitectura negra de San Esteban se une la riqueza natural del valle, con el curso del río Navia de fondo, la visita será inolvidable.
Baleares La singularidad del talaiot de Ferreries. Para muchos su nombre denota que en la zona hubo un antiguo asentamiento de herreros. Las casas blancas parecen encomendarse hacia la iglesia de Sant Bartolomeu. Pero el conjunto no resta importancia a los alrededores. Menorca es un museo arqueológico al aire libre y el término de Ferreries así lo demuestra. Así, en dirección a San Cristobal se encuentra Son Mercer de Baix, conjunto prehistórico compuesto de un poblado de navetas. Junto a la bella playa de Santa Galdana aparece un talaiot de planta cuadrada, único de este tipo en la isla.
Canarias El resurgir de Garachico. A principios del siglo XVIII Garachico quedó sepultada por una erupción volcánica. Hoy día, marcada por las fuerzas del mar y la de la vegetación, es un bello lugar en el norte de Tenerife donde practicar tanto la fotografía como el senderismo y los deportes acuáticos. Es el perfecto lugar para disfrutar de una climatología benigna, de un rico patrimonio arquitectónico, como demuestran sus muchos palacios, casonas de los genoveses y ergidos templos, y de una exquisita naturaleza.
Cantabria Fe a orillas del Ebro. Una verde pradera es el escenario de San Martín de Lines, pequeña aldea de grandes tesoros, situada dentro de la ruta de las ermitas rupuestres, en el valle de Valderredible. Pero, junto al templo excavado en la roca, emerge la imponente colegiata románica del siglo XII. Ella es la mejor muestra de la importancia e influencia monacal que tuvo el valle.
Castilla – La Mancha Casas – Cueva en Albacete. Situada a doce kilómetros de Albacete, Chinchilla es famosa por su bien restaurado castillo del siglo XV y por su casco antiguo apiñado en torno a la plaza mayor. Pero además, en esta localidad, a semejanza con la granadina Guadix, existen las denominadas casas-cueva. Para muchos este tipo de arquitectura se debe a emigrantes granadinos que se instalaron en la localidad y construyeron sus hogares a imagen y semejanza de su pueblo natal.
Castilla y León El centro del Románico. Aguilar de Campoo es punto de partida para conocer el ingente patrimonio románico del norte palentino. Siempre ligada a la actividad monástica, destaca su plaza mayor, centro neurálgico de la localidad, de donde parte la base de la colegiata de San Miguel y en la que se exhiben diversas casas blasonadas. Pero es sin duda, el monasterio de Santa María La Real, el edificio más apreciado.
Cataluña El aire medieval de Calonge. Un atractivo nucleo medieval en torno a la plaza mayor es la primera imagen de esta población que ondea con orgullo un castillo nada despreciable. La fortaleza defendía a la población de la piratería, dada su proximidad a la costa.
Extremadura Un castillo en La Siberia. Serranías y pantanos salpican la comarca pacense de La Siberia. En una de estas sierras locales, en la sierra de Lares ondea el castillo de Puebla de Alcocer, a cuyas faldas se sitúa el pueblo del mismo nombre. Su imponente fortaleza es solo una muestra de la solera que también se deja contemplar en el casco de la población. La casa palacio del Duque de Osuna, la Casona de San Juan o la Casa de la Inquisición, así lo evidencian. La iglesia parroquial de Santiago de estilo mudéjar, que alberga los restos del Maestre de Alcántara, Gutiérrez de Sotomayor, también merece una visita.
Galicia Las palilleiras de Camariñas. La importancia del encaje de bolillos en esta villa marinera es tal que hasta existe un monumento dedicado a las palilleiras. Es común contemplar los días claros a las mujeres moviendo con suma agilidad los palillos, que convierten el hilo en puntillas que se convierten en verdaderas obras de arte. Pero, junto con la labor artesanal de los bolillos, no hay que olvidar el carácter eminentemente marinero de esta aldea coruñesa. No hay que perderse el 16 de agosto la Romería del Carmen, donde los barcos, vestidos de fiesta, se dirigen hacia Muxía. Sus casas y calles, aún imprimen sabor a mar.
La Rioja La única laguna endorreica. En los alrededores de Hervías, en un paraje entre chopos y carrizales se encuentra la que se considera la única laguna endorreica de La Rioja. Pero además esta localidad cuenta con un buen puñado de casas blasonadas que merece la pena contemplar.
Madrid Un pueblo con rey propio. Su población nunca fue sometida por los diversos invasores. Tal vez por ello, los vecinos de Patones tenían rey propio, costumbre que, seguramente, tenga su origen en los visigodos. Los reyes de España toleraron con humor esta particular situación, hasta la llegada de Carlos III. El aislamiento provocó la emigración, naciendo Patones de Abajo. Las lajas de pizarra y la piedra marcan la tónica general de la arquitectura de este caserío madrileño.
Murcia Los Salzillos de Ricote. Dicen que en su esplendorosa huerta en medio del valle del mismo nombre se cultivan los mejores limones de la provincia. Pero no sólo el suelo domesticado por el hombre se muestra bello. La naturaleza en estado salvaje ve planear a sus anchas especies en vías de extinción como el águila real. Su estratégica situación le ha permitido perfilar una azarosa historia, en la que los moros fueron protagonistas indiscutibles. Sus huellas apenas aparecen visibles en el derruido castillo de Alarbona, del siglo IX. Sin embargo es muy recomendable la visita a la iglesia barroco-mozárabe de San Sebastián, declarado de interés histórico-artístico, construida sobre los cimientos de una antigua mezquita. Actualmente ha sido restaurado en su totalidad, conservando dos magníficas esculturas de Salzillo y un órgano único en la provincia. De la misma época es el palacete de Llamas, en la plaza del ayuntamiento, conocido popularmente por la casa de los Alvarez Castellanos.
Navarra La linterna de los muertos de Torres del Río. Emplazada dentro del Camino de Santiago, cercana a Los Arcos, Torres del Río se muestra orgullosa de poder mostrar uno de los templos románicos más bellos de Navarra. La iglesia del Santo Sepulcro, fundada por los caballeros del mismo nombre, presenta planta octogonal, con tres cuerpos que sustentan la llamada linterna de los muertos. Dicha linterna ostentaba las funciones de guiar a los peregrinos, invitarles a rezar por los difuntos y librarles de las apariciones de utratumbra. Sobresale, además, la perfección de la cúpula.
País Vasco La universidad de la pelota vasca. El frontón de Markina-Xemein es un auténtico templo para los aficionados a la pelota vasca. Pero además, cuenta diversos palacios como el de Solarlekua, o iglesias como la de Santa María de Xemein y un buen ejemplo de caserío culto en el barrio de Meabe.
Comunidad Valencia Un castillo que mira al Mar. Dos son las características que definen a Peñíscola: el mar y su castillo, que ocultan un casco urbano de gran belleza. A pesar de que se ha convertido en importante centro turístico, para el viajero el interés de Peñíscola está en su casco histórico, del que dicen trazó el diseño Juan de Herrera. Pero también en su sierra cuajada de senderos donde descubrir una cara diferente de esta ciudad mediterránea.
Portugal Los caldos de Cuba. Poco se sabe del origen etimológico de esta localidad alentejana. Para unos proviene del árabe coba, que significa torre pequeña. Para otros, la génesis reside en la tradición vinícola de la región. No en vano en el pueblo existen gran cantidad de cubas, que aún pueden contemplarse en las bodegas y tabernas. La arquitectura blanca, propia del Alentejo es la tónica general de esta localidad con sabor a vino, a piel, que se transforma en ilustres zapatos y botas, a madera y a mimbre. Região de Turismo da Planície Dourada.
Villa Nova da Barquinha. Poco antes de llegar a la localidad de Vila Nova da Barquinha sobresale su baluarte más preciado. El castillo de Almourol es toda una joya rodeada por las aguas del Tajo. Cuenta la leyenda que fue escenario de luchas entre caballeros que disputaban el corazón de las princesas Polinarda y Misaguarda. Y que aparecían los gigantes de Almourol y Dramusiando medrando a la población. Lugar ideal para los pescadores. El sábalo y el gobio son los trofeos más preciados.
Los gallos de Barcelos. Símbolo de Portugal, el gallo de Barcelos está asociado a una leyenda que cuenta como un joven peregrino fue acusado de robo en la localidad, antes de continuar su camino hacia Santiago. Condenado a morir en la horca, a la hora de la ejecución el reo se encomendó a Santiago, momento en el que los pollos que habían sido asados para el juez comenzaron a cantar, en señal de su inocencia. Barcelos, capital de la cerámica decorativa, cuenta con un Museo Regional dedicada a este arte. Pero además, no hay que marcharse sin visitar sus bellas iglesias, la torre del homenaje, único vestigio de su antigua muralla, hoy convertida en oficina de información, o sin adquirir el popular gallo.