Desde hace miles de años, el yoga es una disciplina que tiene el objetivo de mejorar la salud mental y física de las personas. Su práctica ofrece grandes beneficios ya desde el primer momento, y puede realizarse en la comodidad del hogar sin inconvenientes.
El yoga es una práctica milenaria que tiene sus orígenes en la India, y que, además de proponer una manera de darle movimiento al cuerpo, se enfoca en la mente y el bienestar espiritual de quien lo practica. Se trata de una disciplina que puede ofrecer numerosos beneficios para la salud, por lo que vale la pena comprender más acerca de ella y las diferentes formas de practicarlo.
Distintos tipos de yoga
Antes de profundizar en los distintos tipos de yoga (porque no, no hay uno solo) es importante comprender que dicha disciplina está conformada por una serie de principios enfocados, no solo en la postura del cuerpo, sino también en la relajación, la respiración, la concentración, los mantras y el cuerpo energético o espiritual de las personas. Cuando hablamos de distintos tipos de yoga, nos referimos a las modalidades que, dentro de una misma disciplina, se focalizan más en algunos aspectos que en otros. Pero, ¿cómo se puede empezar? Hoy en día, hay numerosas plataformas que ofrecen información al respecto para dar los primeros pasos. Tal es el caso de YogaEnCasa, que pone a disposición consejos, música y ejercicios para poder realizar esta práctica en la comodidad del hogar.
Los mejores tipos de yoga para practicar en casa son Hatha Yoga, Ashtanga-vinyasa, y Yoga nidra. El primero es uno de los estilos más practicados en todo el mundo, ya que no requiere demasiada práctica para poder empezar. Este yoga es ideal para aquellas personas que, además de buscar darle movimiento al cuerpo, quieren profundizar en las prácticas de meditación. El Ashtanga-vinyasa, por otra parte, ofrece mayor dinamismo que el Hatha, siendo perfecto para quienes buscan concentrarse más que nada en mejorar la tonicidad y la flexibilidad del cuerpo.
Sin embargo, el Yoga nidra focaliza sus ejercicios en la relajación. Si bien se puede practicar de manera mixta, combinando ejercicios provenientes del Ashtanga o del Hatha, el Yoga nidra busca dar solución a problemas de ansiedad, estrés o nerviosismo. Además, el yoga tiene otro componente fundamental, llamado Mudra. Se le llama así a los gestos que se hacen con distintas partes del cuerpo, y que ayudan a focalizar los flujos de energía. Estos gestos pueden variar, aunque los más conocidos son los que se hacen con las manos. El objetivo de incluirlos en las prácticas de yoga, es alcanzar un mayor estado de relajación y quietud, permitiendo a la persona practicante, concentrarse y conocerse en mayor profundidad a sí misma. Los mudras se pueden practicar en la comodidad del hogar, mientras se realizan otros ejercicios.
Beneficios del yoga
Cualquier tipo de yoga puede ofrecer múltiples beneficios para la salud. En primer lugar, es importante tener en cuenta que esta práctica es muy versátil, y que pueden practicarla tanto quienes desean volverse más flexibles y ágiles físicamente, como quienes buscan mejorar su capacidad de concentración, y profundizar en la parte espiritual y mental de esta disciplina. Uno de los principales beneficios del yoga es el alivio del estrés, la ansiedad o el nerviosismo. El objetivo de esta práctica es que el practicante pueda concentrarse en el presente, dejando de lado las preocupaciones del día a día y los pensamientos circulares que a menudo aparecen y conducen a un estado de bloqueo mental. Debido a esto, muchas personas logran entrar en un estado de paz interior, pudiendo identificar aquellos pensamientos y emociones que les agobian, para poder darles buen cauce.
Además, el yoga es perfecto para aliviar las tensiones físicas. Algunos tipos de yoga, como el yoga Kundalini, que combina ejercicio físico con respiración y canto de mantras, se focalizan más que otros en la exigencia física. Aun así, lo cierto es que todas las modalidades pueden ayudar a desarrollar mayor flexibilidad, equilibrio y tonicidad de los músculos. Del mismo modo, así como es posible aliviar las preocupaciones y las tensiones mentales, el yoga busca lograr que el cuerpo pueda aliviar las contracturas y dolencias que le puedan afectar en el día a día. Con la exigencia física y una mayor conciencia del entorno, así como del propio cuerpo y de la alimentación, el yoga es también ideal para bajar de peso, especialmente para aquellas personas que no encuentran afinidad con otro tipo de actividades deportivas.
En definitiva, el yoga puede ser la mejor opción para sentirse mejor con uno mismo, ya que con el tiempo, cada practicante puede ir incorporando nuevos conceptos, ejercicios y nociones propias de la disciplina, que le pueden ayudar a tener un momento de calma y relajación, sin perder el componente físico.
