Por las tierras del Oza se oye aún el rumor de los pasos y los rezos de los santos. El Valle del Silencio es donde estos encontraron el lugar más cercano al cielo.
En Santo Tomás de las Ollas, a la entrada de Ponferrada, se halla un interesante templo mozárabe. Data del siglo X y se conserva el ábside, que a día de hoy está unido a una nave rectangular. Para acceder a él, basta con cruzar su portada románica de siglo XIII. En su interior, bóveda con cascos, capiteles lisos y pilastras monolíticas de granito.
En Villar de los Barrios se entra por la ermita del Cristo. Este edificio barroco, reformado en 1830, cuenta con una sola nave con bóveda de cañón y cúpula sobre pechinas. Además, conserva buenas imágenes en su interior. Destaca, por ejemplo, un Cristo yacente del siglo XVII.
Por otro lado, merece la pena pasear por sus calles hasta la iglesia parroquial de Santa Colomba (s. XVIII), de una sola nave con planta de cruz latina, bóveda de cañón con lunetos y cúpula sobre pechinas.
Los secretos del Valle de Oza
Salas de los Barrios. Con viejas casonas higaldas, podemos ver la iglesia parroquial de San Martín. Se encuentra situada en el camino a Lombillo. Además, la iglesia de origen medieval fue rehecha completamente en el siglo XVI. Es de tres naves separadas por columnas y cubiertas por bóvedas de arista.
Si decidimos pasar por la capilla de la Visitación, descubriremos que es de una sola nave. En las obras trabajaron Nicolás de Brujas y otros maestros canteros y ensambladores.
Campo. Se encuentra a 3 km. de Ponferrada y conserva varios edificios de interés. Entre ellos, la escuela fundada en el siglo XVIII por el marqués de Campoalegre.
A las afueras del pueblo, sola sobre un altozano rodeado de olivos, se sitúa la iglesia parroquial. De ella podemos decir que tiene tres naves separadas por pilares y arcos de medio punto.
Valdueza. Hasta que se integró en el Ayuntamiento, este municipio contaba con su capital en San Esteban de Valdueza. A día de hoy, la zona no sobrepasa los 500 habitantes, repartidos en 11 núcleos. Tres de ellos están totalmente despoblados.Las inclemencias del clima, la pobreza de la tierra y las dificultades de comunicación son factores que han propiciado ese abandono.
San Esteban de Valdueza, a orillas del Oza, es un pueblo señorial con casonas blasonadas. En su iglesia parroquial se halla la virgen de Folibar.
Peñalba. Declarado Conjunto histórico Artístico Nacional tiene a su entrada un mirador desde el que puede verse la cabecera del Valle del Oza.
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