Hacer las maletas, despedirse de la familia y lanzarse a la aventura de vivir en otro país europeo requiere algo más que ilusión. Hace falta organización, mucha paciencia y, sobre todo, contar con un servicio de mudanza internacional de confianza que haga que el proceso no sea un quebradero de cabeza. En 2025, cada vez más españoles optan por mudarse fuera buscando nuevas oportunidades, mejor calidad de vida o simplemente un cambio de aires. Y aquí es donde entran en juego las empresas especializadas que, además de trasladar muebles y cajas, ofrecen soluciones integrales para que uno no pierda ni la calma ni los nervios por el camino.

Contratar un buen servicio de mudanza internacional no va solo de llevar un sofá de Madrid a Ámsterdam. Va de tener claro que detrás hay un equipo que entiende que tus cosas no son solo objetos, sino parte de tu historia. Y cuando eso se combina con rutas eficientes, permisos de aduana bien gestionados y una buena dosis de cercanía, el cambio de país se vuelve mucho más llevadero. Vamos a ver por qué tantos españoles están eligiendo ciertos destinos europeos como sus nuevos hogares.
Alemania: trabajo estable en ciudades cosmopolitas
No es ninguna sorpresa que Alemania siga siendo uno de los destinos estrella para quienes se marchan desde España. Ciudades como Berlín, Múnich o Hamburgo atraen por su gran oferta laboral en comparación con la que hay en España, sobre todo en sectores como la ingeniería, la tecnología o la sanidad. Además, el sistema de transporte público es impecable, los servicios sociales funcionan como un reloj y la calidad de vida se nota incluso en los pequeños detalles del día a día. La única «pega» es el clima, más duro y frío que el patrio, pero todo lo demás compensa ese factor de incomodidad.
Tal y como nos explican desde la empresa de mudanzas Grupo Amygo, líder en el sector de las mudanzas internacionales, las mudanzas con destino Alemania son de las más frecuentes desde España. Por este motivo, los servicios especializados en este tipo de trabajos ya tienen rutas optimizadas, conductores con experiencia en los requisitos de entrada y, sobre todo, soluciones logísticas que agilizan mucho todo.
Portugal: el destino perfecto para el teletrabajo
Sí, Portugal también se ha convertido en un destino de moda para quienes quieren empezar de nuevo sin alejarse mucho de su zona de confort. Ciudades como Lisboa, Oporto o incluso algunas zonas del Algarve tienen un encanto especial y ofrecen una calidad de vida envidiable. Además, el auge del trabajo remoto y del sector tecnológico ha convertido al país en un pequeño paraíso para nómadas digitales y emprendedores.
Mudarse a Portugal tiene algo muy positivo: la sensación de estar en casa. El idioma no es un obstáculo tan grande, la gastronomía tiene puntos en común, y el clima acompaña durante buena parte del año. Muchas empresas de mudanza internacional ofrecen servicios exprés a este destino, precisamente porque la demanda ha crecido muchísimo.
Irlanda: inglés y oportunidades en el sector tecnológico
Irlanda ha sido durante años uno de los países favoritos para aprender inglés, pero en 2025 el perfil del español que se muda allí ha cambiado bastante. Ya no son solo estudiantes o jóvenes que buscan aventuras temporales: ahora hay muchas familias y profesionales del sector tecnológico e incluso jubilados que deciden instalarse en Dublín, Cork o Galway, atraídos por los buenos salarios y las oportunidades de desarrollo.
El proceso de mudanza hacia Irlanda puede parecer más complejo, ya que incluye necesariamente avión o barco, pero las empresas que trabajan frecuentemente este destino, como Grupo Amygo, lo tienen más que controlado. Se encargan de recoger y embalar las cosas en casa y trasladarlas por mar o aire hasta tu nuevo destino, y cuentan con soluciones para todo tipo de presupuestos y necesidades.
Suiza: naturaleza, estabilidad y calidad a otro nivel
Aunque Suiza no forma parte de la Unión Europea, cada vez más españoles se animan a instalarse allí. Ya sea por trabajo, estudios o simplemente porque buscan una vida más tranquila y organizada, ciudades como Ginebra, Zúrich o Lausana están atrayendo a perfiles muy variados. Lo que enamora de Suiza no es solo su paisaje, que parece de postal, sino también la seguridad, el buen nivel de los servicios públicos y, sobre todo, los altos salarios, que son desorbitados si los comparamos en España, especialmente en el sector de los trabajos que no requieren una alta cualificación académica: por ejemplo, el sueldo medio de un albañil en Suiza ronda los 6.300 euros al mes.
Eso sí, mudarse a Suiza implica un poco más de preparación, especialmente a nivel de papeleo porque no se encuentra en la Unión Europea. Por suerte, las empresas de mudanza internacional dominan todos los requisitos de entrada al país y que pueden ayudarte con los permisos, los seguros obligatorios y hasta el transporte de mascotas. Con organización y ayuda profesional, todo es mucho más sencillo.