Durante los meses de septiembre y octubre las cientos de quintas ubicadas en las márgenes del río Duero, se preparan para recibir a amantes del vino que viajan a esta región portuguesa para vivir la época de vendimia.
La Región del Duero se despliega ante el visitante a través de la belleza de sus impactantes paisajes, donde se aprecian las terrazas trazadas en las laderas de las montañas y en el terreno inclinado que termina junto al río. Es en ese espacio donde se alzan los viñedos cuyas uvas esperan ya a ser recogidas.
Ruta de la vendimia
En las márgenes del río Duero encontramos las poblaciones que históricamente preparaban los “rabelos” (embarcación donde se transportaban las pipas del vino ya extraído) camino a Oporto. Conocer esta zona es descubrir sus paisajes viajando en barco, tren o coche.
Pinhão: Se trata de un pueblo tranquilo que florece en otoño, con la llegada de recolectores de uva de todo el país. Históricamente, desde Pinhão se transportaba el vino en barco o en tren. Su estación ferroviaria, de gran belleza, posee paredes adornadas con azulejos donde se representa desde la recogida de la uva hasta su transporte hacia Oporto.
Covelinhas: Célebre por el mirador de São Leonardo da Galafura desde el cual brinda la espectacular vista de un paisaje dominado por el río Duero, marcado por las filas de viñedos que se extienden hasta las laderas de las montañas.
De camino se encuentran diversas quintas donde se recomienda visitar las bodegas y realizar catas de vino. La oferta de casas y quintas donde se produce vino de esta región es cada vez más abundante. Lo mejor será elegir las ubicadas en la población más famosa.
Peso de Régua: Es el centro productor de la región vinícola. Todo el pueblo está prácticamente dedicado al Vino de Oporto. Sus tabernas y la Casa do Douro ofrecen de los tintos más añejos a los más nuevos.
En este ciudad la visita a Casa do Douro es obligada. Éste es un edificio histórico hoy sede de una de las organizaciones reguladoras de la industria del vino de Oporto, instalada aquí para garantizar los ingresos de los pequeños recolectores. Es por ello que se dedica a comprar la producción de los vendimiadores de la región para venderla a los grandes barcos que exportan el Oporto al exterior de Portugal.
Lamego: Es ejemplo del turismo cultural, que junto al etnológico, ofrece la Región del Duero, tan rica por sus paisajes y la tradición vinícola como por su legado artístico.
De esta ciudad, situada en la margen sur del río Duero, destaca el valor artístico-cultural de algunas de sus joyas arquitectónicas. Se trata de una población igualmente conocida por sus dos construcciones románicas fruto del arte sacro.
El Vinho do Porto
Este caldo tan popular internacionalmente, pertenece al género conocido como “vino fortificado”, es decir, el producto de la adición de brandy al vino cuando aún está en proceso de fermentación. Es un vino producido en los viñedos de la Región Vitícola del Alto Duero, que antes del siglo XVIII ya era conocida por sus vinos tintos y blancos, entonces no consumidos fuera del país.
El Oporto tiene seis tipos de tintos dulces y blancos secos: Ruby (los más jóvenes y frescos), Tawny, Colheita, LBV, Crusted y Vintage. Éste último es el de máxima calidad; solo se elabora en añadas consideradas excepcionales por el Instituto do Vinho do Porto.
La visita a Oporto y la Región del Duero este otoño será seguro el momento perfecto para probar la nueva añada de la denominación de origen más antigua del mundo. Ésta es una magnífica ocasión para disfrutar también de la ciudad de Oporto, donde se estrena The Yeatman Oporto, el primer hotel del país dedicado al Vinho do Porto.