Comidas de empresa, brindis por el nuevo año que ya asoma y algún que otro amigo invisible. La Navidad ya ha llegado a las calles de las principales ciudades con el tradicional iluminado y también a las empresas, donde ya toca pensar qué cogemos de regalo.
Toca organizar la comida/cena de empresa propia de esta época que, como siempre, viene acompañada de su posterior sobremesa y alguna que otra copa. Un evento al que en los últimos años le acompaña el conocido como «amigo invisible». Este juego, que no termina de convencer a todos, consiste en regalar de manera aleatoria (por sorteo) algo que no pase de un límite económico fijado previamente por los participantes.
Y, ¿a qué me refiero cuando digo que no convence a todos? Pues a que muchas veces no es sencillo encontrar el regalo perfecto para una persona que te ha tocado en un sorteo. Puede que, directamente, porque no hayas hablado jamás con él o ella.
Es por eso que, en este post, intentamos darte las claves para triunfar con el regalo y no comerte mucho la cabeza. Una idea útil y original es, por ejemplo, comprar bolígrafos personalizados.
Infinitas posibilidades cuando hablamos de bolígrafos
Es probable que regalar un bolígrafo con motivo del amigo invisible no fuera tu primera opción. Quizás porque es una idea tan básica que nadie se da cuenta de que es un acierto seguro. Porque, ¿quién no necesita este elemento a diario? A mí, por lo menos, me piden que preste uno varias veces al día. La mayoría de ellas porque han perdido el suyo.
Y ahí está el «quid» de la cuestión. En cómo hacer un regalo tan sencillo y tan útil sin que le destinatario tarde menos de un día en perderlo. Pues la respuesta es sencilla: ¡personalizándolo!
El nombre del dueño por un parte y el logo de la empresa (para que recuerde quién se lo regaló) por el otro. Es una de las ideas que más triunfa, además, a lo largo de todo el año. En reuniones formativas o como detalle para el conjunto de los trabajadores, son muchas las empresas que optan por usar los bolígrafos como estrategia de marketing. ¿Por qué no entonces también como regalo navideño?
Luego, eso sí, toca hablar de los tipos. Ahí es donde nos podemos entretener más pero, por poco que conozcas a tu amigo invisible, seguro que algo sabes o, al menos, intuyes. Por ejemplo, los bolígrafos personalizados los puedes adquirir de muy alta calidad, ecológicos, con pulsador o algo más baratos. La mayoría, de hecho, incluye ya un puntero táctil para pantallas y esto es muy útil tanto en el hogar como en el propio trabajo. Incluso, puedes añadirle el teléfono y la dirección pagando una diferencia mínima.
Más ideas para sorprender a tu amigo invisible
Ya hemos analizado por qué un bolígrafo es el mejor regalo y, hasta los más asépticos, han cedido ante este razonamiento. Ahora, ¿por qué no analizamos otros datos sobre los regalos promocionales y descubrimos qué otras opciones pueden ser válidas para no acabar convertidos en la persona que hizo e peor regalo a un compañero de la empresa?
Álbum de fotos. ¿Amante de la fotografía? Entonces es muy sencillo. Te proponemos revelar una serie de fotografías juntos en diseño ‘polaroid’ y meterlas en un álbum sencillo dejando espacio para que rellene el resto a su gusto.
Sacacorchos. Con un precio que no se eleva en exceso y la posibilidad de personalizarlo a tu gusto. Esta opción es perfecta para aquellos que disfrutan con una buena copa de vino por la noche al llegar a casa tras un día duro.
Velas aromáticas. Ten cuidado y cómpraselo a alguien con quien tengas un mínimo de confianza, no vaya a pensar que le estás mandado una indirecta. Las de vainillas siempre son un acierto. También, las de lavanda. Y es que no hay nada mejor que ver una peli en el sofá con estos aromas de fondo.
Calendario de adviento. Esta idea es súper chula, pero ten en cuenta las fechas antes de adquirirlo. Además, su destinatario ni siquiera tiene que ser un adicto al chocolate. Sé original y prueba con un calendario de… ¡tés!
Un puzle. ¿Tu amigo invisible se acaba de mudar y necesita decorar la casa? No te limites a hacerte con un simple cuadro. Pónselo algo difícil y deja que sea él quien genere su propia obra de arte con un puzle, por ejemplo, del Guernica.
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Los bolígrafos son un imprescindible que definitivamente nunca falla a la hora de elegir tu regalo corporativo de empresa. Yo este año también los he comprado, son de gran calidad y totalmente personalizables.